No soy de aquí, la historia de millones de colombianos hecha cómic | ¡PACIFISTA!
No soy de aquí, la historia de millones de colombianos hecha cómic
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No soy de aquí, la historia de millones de colombianos hecha cómic

Sara Kapkin - septiembre 7, 2016

Franco Lora descubrió mientras trabajaba en su proyecto de grado que también era víctima.

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Del número Pesadillas del comic No soy de aquí. Todas las imágenes cortesía Franco Lora.

El desplazamiento forzado es una de las peores consecuencias que nos han dejado más de 50 años de conflicto armado. Colombia es el país con la cifra más grande desplazados internos en el mundo. Sí, el primero, el que más. Según la Agencia de la ONU para los Refugiados, ACNUR, la cifra es de 6.9 millones de personas. Solo piense que, ni sumando el total de habitantes de Medellín (2,2 millones) y Cali (2 millones), las dos ciudades más importantes del país después de Bogotá, se alcanza el total de la cifra de desplazados internos.

De los desplazados creemos que nos sabemos la historia. Todos tenemos una secuencia en la cabeza: huyen de la violencia, salen de afán, muchas veces solo alcanzan a llevarse lo que tienen puesto, avanzan sin mirar atrás, llegan a otro lugar, tratan de construir una nueva vida o de retornar a la que tenían. Pero, pocas veces, nos detenemos a pensar en el desarraigo. Atrás no quedan solo las casas, también los paisajes, las rutinas, las costumbres, la cultura, una vida que echa a correr y que se pregunta ¿quién soy si no sé a dónde voy?

A partir de esa pregunta fue que Franco Lora, un pelado de 26 años de Cali empezó a explorarse a sí mismo. Cuando tenía dos o tres años de edad -no recuerda con precisión-, él y su familia se fueron a vivir a Neiva. Allá vivió hasta terminar el colegio, y luego se fue a Bogotá para estudiar Diseño en la Universidad de Los Andes en Bogotá. De la salida de Cali solo recuerda que fue hace mucho, tal vez en 1992 y que todo pasó después de que alguien mató a su hermano.

“Con mi familia siempre vamos a Cali una vez al año. Siempre me he sentido ajeno a la ciudad, aunque la gente siempre me dice que soy de allá. Yo se que nací ahí, pero me siento de Neiva, toda la cultura que tengo es de allá. ‘Yo debería ser de acá, pero no lo soy’, es lo que siempre he pensado. Por eso mi cómic se llama No soy de aquí”, dice Franco.

No soy de aquí empezó como el proyecto de grado para la universidad. Era la recopilación de todas las historias que le había contado su mamá, que trabajaba con desplazados. “Ahí fue que me di cuenta de que a mi hermano lo habían matado y que nosotros también tuvimos que desplazarnos. Yo también soy víctima”, dice Franco.

Todavía se esfuerza por no ‘matar’ el recuerdo de su hermano Mauricio, de 20 años, pianista y estudiante de Medicina. Lo recuerda en presente. “Cuando cumple años, siempre vamos a misa. También el día que lo mataron. Lo recordamos siempre, está presente”.

Alimentado por la historia personal, el cómic se volvió más ambicioso, más personal. El trabajo de grado sobre el desplazamiento forzado es ahora un activismo, un intento por crear conciencia sobre qué pasa antes y después de llegar a la ciudad, de entender los distintos ‘por qués’.

Su primera edición terminó publicada en Internet sin mucho bombo. Mientras hacía un máster en Nueva Zelanda, retomó el proyecto. Y, ahora, son tres historias paralelas, cada una narrada desde el punto de vista de los personajes: el victimario, las víctimas, y la última, que está por terminar, desde los niños.

En sus cómics, Franco no menciona ni hace alusión a ningún grupo armado en especial. Los personajes son ficción, pero las historias son reales. Es una “amalgama”, como lo llama él, entre las historias que le contaba su mamá después del trabajo, las que le proporcionó el Centro Nacional de Memoria Histórica y otras más que escuchó después de hablar con refugiados colombianos en Nueva Zelanda.

“Mucha gente que está en Bogotá es ajena a lo que pasa en las zonas rurales. Sólo ven lo que les muestran los medios de comunicación. Yo quiero contar la historia que hay detrás de desplazados que son vistos como mendigos en las ciudades”, dice Franco.

Franco está buscando acuerdos con varias casas editoriales para poder ‘mover’ su trabajo. Mientras tanto, nos dio un adelanto.

Del número Huyendo del comic No soy de aquí.
Del número Huyendo del comic No soy de aquí.
Del número Pesadillas del comic No soy de aquí.
Del número Resiliencia del comic No soy de aquí.

*Si quiere ver más del trabajo de Franco Lora sígale la pista por aquí o por acá