La guerrilla entregó el segundo 30 % de su arsenal. Ni Santos ni los jefes de las Farc llegaron al Cauca, donde iban a hablar del desarme.
Hace una semana, las Farc, la guerrilla que ha marcado la vida política del país en las últimas cinco décadas, dejó poco más del 30% de sus armas: unas 2.300. Más de dos millares de máquinas para matar que quedaron en manos de la ONU. Sin embargo, el hecho pasó desapercibido y a duras penas se mencionó en los medios.
Para llamar la atención sobre el desarme, que se suponía debía terminar el pasado 31 de mayo, la guerrilla y el gobierno anunciaron un evento “histórico” para este martes, en La Elvira (Cauca). Allí, las Farc empezaron a dejar el segundo 30% de las armas que están en su poder. Pero el encuentro no les salió bien.
El acto público, que debía arrancar a las 10 de la mañana, empezó pasada la 1:30 de la tarde. Cuando por fin inició, la maestra de ceremonias anunció que ni el presidente Juan Manuel Santos, ni los ministros del Interior y Posconflicto; ni los integrantes del Secretariado de las Farc “Iván Márquez”, “Carlos Antonio Lozada” y “Jesús Santrich”; ni los expresidentes Pepe Mujica (Uruguay) y Felipe González (España) habían llegado a La Elvira, como estaba anunciado.
Las “condiciones climatológicas”, según la presentadora, impidieron que los protagonistas del evento hablaran frente a las autoridades locales y los guerrilleros que esperaban en un coliseo. Los únicos que estaban en la amplia tarima eran el comandante de las Farc “Pablo Catatumbo” y el jefe de la misión de la ONU en Colombia, Jean Arnault.
El evento no solo perdió perfil por la ausencia de Santos, los invitados internacionales y los miembros del Secretariado, sino también por la manera como se mostró la continuidad de la dejación de las armas. Empeñadas en que ver a los guerrilleros dejar sus fusiles sería interpretado como una “rendición”, las Farc solo permitieron que se proyectara un video de un funcionario de la ONU desactivando y alojando pistolas, lanzagranadas, fusiles y lanzacohetes en un contenedor. Como ya estaba sentenciado, no hubo foto ni video que les demostrara a los incrédulos que la guerrilla se está desarmando.
Al final, lo único que pudo verse fue a cinco guerrilleros recibiendo certificados de dejación de armas de manos de funcionarios de la Oficina del Alto Comisionado para la Paz y luego la guerrilla distribuyó unas fotos del armamento guardado en los contenedores de la ONU. Solo quedaron para el recuerdo los discursos en los que, como es costumbre, las Farc alegaron incumplimientos por parte del gobierno y el Ejecutivo buscó mostrar resultados de la implementación de los acuerdos de paz.
Este es un resumen de las frases que dejó la jornada, que por cuestiones climáticas se desarrolló, en buena medida, desde la base área Marco Fidel Suárez de Cali, desde donde se hicieron casi todas las intervenciones:
Jean Arnault
“No dejemos que la contabilidad de las armas eclipse el significado profundo del cumplimiento del cese al fuego”.
El jefe de la misión de la ONU en Colombia resaltó la voluntad del gobierno y de las Farc para respetar el cese al fuego bilateral. Dijo, además, que en marzo pasado la entidad registró más de 7.000 armas en los campamentos de la guerrilla, lo que indica que entregará un arma por cada hombre que se reintegrará. Para Arnault, esa correspondencia de cifras indica que el proceso de paz de Colombia es uno de los más exitosos del mundo. Agregó que la dejación de armas significa que las Farc se reintegrarán con “seguridad y dignidad” a la vida política, que el gobierno podrá afianzar la paz y la reconciliación, y que las comunidades rurales podrán “vivir una existencia exenta de violencia”.
Pablo Catatumbo
“Depositamos en la mano del pueblo colombiano la defensa del acuerdo de paz”.
El jefe guerrillero, integrante del Secretariado de las Farc, reiteró el compromiso de la guerrilla con el proceso de paz. Dijo, además, que el gobierno está demorado en poner en marcha los programas de reintegración para los guerrilleros y la unidad de la Fiscalía que se encargará de perseguir a las organizaciones criminales que atentan contra defensores de derechos humanos, líderes de movimientos sociales y políticos, y personas comprometidas con la implementación de los acuerdos. Por eso, pidió el apoyo de la ciudadanía.
Juan Manuel Santos
“No podemos permitir que la desconfianza impere”.
Luego de escuchar los reclamos de la guerrilla, el presidente reconoció que la implementación de lo pactado ha “tenido demoras y obstáculos”, pero dijo que “ha avanzado mucho más que cualquier otro acuerdo que se haya firmado en la historia reciente”. Santos también se defendió de las acusaciones alegando que el Congreso ha aprobado las leyes necesarias para otorgar seguridad jurídica a las Farc, a excepción de la ley estatutaria de la Jurisdicción Especial para la Paz. Asimismo, dijo que próximamente se pondrán en marcha los planes de desarrollo territorial para mejorar la calidad de vida de los campesinos que viven en zonas de conflicto y que el gobierno sí les ha brindado garantías de seguridad a los guerrilleros en tránsito a la legalidad.
Iván Márquez
“El Estado se juntó para construir la guerra. Esperamos que se junte para hacer la paz”.
El antiguo jefe negociador de las Farc en La Habana le lanzó duros dardos al gobierno. Dijo que el Estado avanza “de manera lentísima” en la aplicación de la ley de amnistía, “cuando la excarcelación de combatientes debió constituirse en un incentivo para acelerar el paso de la insurgencia a la actividad política legal”. Además, declaró que “en este proceso la preocupación central no puede ser solo el destino de las armas”, sino que se debe avanzar en el suministro de tierra, vivienda, salud y educación para los guerrilleros. También se quejó por el debate que abrió recientemente el fiscal Néstor Humberto Martínez sobre las finanzas de la guerrilla, y dijo que la discusión buscaba “trivializar la importancia de la dejación de armas”. Remató con que este jueves habrá una reunión entre las partes para encontrar argumentos “que permitan decirles a los guerrilleros que hay que continuar la tarea”.
Pepe Mujica
“Colombia es un laboratorio de la historia. Por favor, no lo hagamos fracasar”.
El expresidente de Uruguay, que hace parte del componente internacional de la Comisión de Seguimiento a la Implementación, hizo un llamado para que los colombianos respalden el proceso de paz con las Farc.