El Presidente pidió al "Congreso de la paz" que se transforme en el "Congreso del posconflicto".
- Juan Manuel Santos dijo que será el último 20 de julio que se conmemore en guerra. Foto Presidencia de la República.
Fue un mensaje más corto de lo acostumbrado. Pero apenas unos cuantos minutos fueron suficientes para que el presidente, Juan Manuel Santos, “cobrara” el que seguramente considera su mayor triunfo político desde que asumió el cargo: la firma del acuerdo del fin del conflicto con las Farc.
En su discurso del 20 de julio, al instalar la nueva legislatura en el Congreso de la República, Santos destacó el papel de la Cámara y el Senado, homenajeó a las Fuerzas Militares, presentó un inventario resumido de iniciativas y proyectos aprobados o por aprobar, pero sobre todo se enfocó en la paz.
Esa ha sido la constante en todos los escenarios similares desde que se desarrollan los diálogos. Pero esta vez, llegó al Capitolio con resultados en la mano, el botín del cese al fuego definitivo con las Farc y la declaratoria de exequibilidad del plebiscito para la paz por parte de la Corte Constitucional.
Santos se enfocó en que, tras el pronunciamiento de la Corte, los ciudadanos serán los que decidirán si el acuerdo final de paz al que se llegue con las Farc será implementado en los términos en que fue negociado. “Como gobernante, tengo la plena certidumbre sobre la seriedad, la responsabilidad y la prudencia con que se llevaron a cabo las negociaciones, y por eso confío en que los colombianos darán vía libre a este camino hacia la paz”, dijo Santos.
El Presidente también se enfocó en el debate que enfrentará el país con el inicio de las campañas a favor o en contra de los acuerdos. Les dijo a los congresistas que son ellos los llamados a promover la participación. Aclaró que con eso no les pide que hagan campaña por el SÍ o por el NO, pero sí “que promuevan un debate de altura y con ideas, con argumentos y no medias verdades, con realidades y no con mitos, para que los colombianos, libremente, definan su futuro”.
“Reformas progresistas y de avanzada”
En su lista de iniciativas aprobadas recientemente por el Congreso, Santos incluyó, entre muchas otras, la Ley Antidiscriminación, la Estrategia Integral por la Primera Infancia y la Ley del Primer Empleo. También otras tan polémicas como la Reforma al Equilibrio de Poderes y en nuevo Código de Policía.
Aunque muchas de las iniciativas que destacó están lejos de una agenda social, dijo que se trata de “logros concretos en la garantía de los derechos sociales de los colombianos”.
Calificó esas normas como un salto histórico y afirmó que “las grandes reformas que transforman a Colombia, reformas progresistas y de avanzada, las estamos haciendo desde las instituciones republicanas y democráticas, y no desde las armas, no desde la revolución, no desde el autoritarismo”.
En la misma vía, aseguró que el “Congreso de la paz, será ahora el Congreso del posconflicto”. Por tanto, pidió que la nueva legislatura se enfoque en garantizar “la sostenibilidad de las finanzas públicas y la continuidad de nuestros programas sociales”.
En ese punto del discurso, Santos hizo una transición y volvió a centrarse en la paz. Dijo que más de dos siglos después del grito de independencia, Colombia tiene “la oportunidad de oro de consolidar esa libertad y esa democracia, y de poner punto final a una guerra interna que nos ha desangrado por décadas”.
“En Colombia se estaba perdiendo la capacidad de ser compasivos, de indignarnos con la violencia, de sentir el dolor del otro, de conmovernos con su sufrimiento”, señaló. Luego, insistió en que la firma del cese al fuego y de los protocolos para el desarme de las Farc “ha sido la mejor noticia en mucho tiempo para los colombianos”.
Entonces, se detuvo para hacer un homenaje a la Fuerza Pública. Dijo que el desfile militar del Día de independencia fue “el desfile de la victoria”. Ese fue el único apartado de sus palabras que logró arrancar aplausos del Centro Democrático, el sector de oposición que ha liderado las críticas contra los acuerdos de paz.
Aun en ese momento, no dejó de hacer énfasis en la refrendación de los acuerdos. Al agradecimiento para soldados y policías, conectó otro agradecimiento, este para el Congreso, las cortes, las instituciones y “los ciudadanos que votarán SÍ en el plebiscito. Porque todos están llevando a nuestra patria a contemplar un nuevo amanecer”, afirmó Santos.
Finalmente, dijo que la paz no es suya ni de su Gobierno, que es “demasiado grande para tener dueño”. También, que no es la solución a todos los problemas del país: “El fin del conflicto será el comienzo de un periodo de arduo trabajo para construir la paz en cada rincón del territorio”.
Si todo sale como está previsto, y así lo dijo el Presidente al terminar su intervención, este habría sido el último 20 de julio que se conmemora en medio de la guerra entre el Estado y las Farc.