Vidal, quien viene de una generación de defensores de tierras y derechos humanos, tendrá la responsabilidad de garantizar que el Estado cumpla con las demandas del Paro Cívico de 2017.
Buenaventura se cansó. La ciudad portuaria que tiene a sus últimos cuatro alcaldes en la cárcel eligió, hace una semana –con 28.000 votos– a Víctor Vidal como nuevo alcalde de la ciudad. Este caso es insólito: Vidal, uno de los líderes del Paro Cívico de 2017 y un defensor de los derechos afro con el Proceso de Comunidades Negras (PCN), derrotó a las maquinarias políticas que han dominado al puerto.
Con el aval de la Colombia Humana y la UP, Vidal llegó a la Alcaldía. En los últimos dos años fue una voz importante en las negociaciones del Paro Cívico con el gobierno. Este movimiento ciudadano fue el que paralizó el puerto durante 22 días y que logró obtener la atención del gobierno y compromisos concretos, como la inversión por 1,6 billones de pesos para los próximos 10 años. Desde entonces, existen varios comités marchando en los que se debaten las inversiones en salud, educación, vivienda, ordenamiento territorial, entre otros ejes.
La llegada de Vidal representa una amenaza para las maquinarias de la región que durante las últimas décadas han controlado el poder. De hecho, los candidatos que perdieron pidieron un reconteo de votos. Vidal le ganó Ligia del Carmen Córdoba, del partido de la U, por más de 7.000 votos. También derrotó a Jaime Marinez, del Verde y a Héctor Copete, por más de 4.000 votos. El temor, como nos contaban en su campaña, era que durante el reconteo se presentaran actos de corrupción.
“En este proceso hubo garantes internacionales y sí hay indicios de compra y venta de votos por parte de las maquinarias”, nos contó una fuente del Paro Cívico. “El temor que teníamos es que en ese proceso de reconteo se presentaran actos de corrupción, y Víctor no la va a tener fácil porque él representa los procesos comunitarios y hay muchos intereses políticos de por medio. Lo importante, en medio de todo, es que el pueblo lo apoya y fue el pueblo el que castigó en las urnas a los políticos tradicionales de Buenaventura que ni siquiera han sabido representarnos en el congreso”.
La misma fuente nos contó que esta alcaldía no será fácil: “Víctor es muy fuerte y a su vez muy frágil. Fuerte porque tiene el respaldo del Paro Cívico y ganó con una campaña limpia y con la gente, pero a su vez hay unas expectativas altas; y ya no puede estar la excusa de que la alcaldía es un obstáculo y que por eso no salen muchas cosas. Ahora, él se tendrá que sentar con los empresarios, con TC Buen (Terminal de contenedores de Buenaventura), con todos los sectores y los partidos políticos. Ahí hay un temor de que le obstaculicen los procesos. Lo peor que podría pasar sería que lo asesinaran cuando él intente aterrizar todo el discurso en las políticas públicas, ese es el principal temor porque él sin duda luchará contra monopolios muy fuertes que han tenido a Buenaventura en la miseria”.
Debido al reconteo, Vidal tuvo que esperar una semana para que la Registraduría confirmara los resultados en Buenaventura. El candidato Jaime Marinez, quien quedó en segundo lugar con 24.800 votos, insistió varias veces en el reconteo de votos, esperando un resultado a su favor que al final no se dio. Pero también hubo sorpresas: la candidata Libia Mosquera, del Partido Conservador, emitió un comunicado aceptando la victoria de Vidal y diciendo lo siguiente: “Estamos felices, la comunidad ha despertado y fueron derrotadas las maquinarias”.
Vidal llega a la alcaldía en momentos difíciles. De acuerdo con la Defensoría del Pueblo, actualmente existe una confrontación entre las bandas La Local y La Empresa por el control de tráfico de drogas. Además, las disidencias de las Farc y algunas células del ELN están haciendo presencia en las comunas 3, 4, 9, 10 y 12. Los líos por las tierras y las ampliaciones del puerto también están sin resolver y , de hecho, fue justamente por un lío de tierras que fue asesinado Temístocles Machado, antiguo líder social de la comuna 6 de Buenaventura.
Vidal, quien estudió administración de empresas y quien desde su adolescencia participó en procesos organizativos de base, viene con propuestas que pueden generar ruido a nivel local y nacional. Una de ellas es establecer una suerte de proceso de paz entre los grupos armados, buscando, más que un “pacto del fusil”, una desmovilización y un desarrollo de lo que se planteó en el Acuerdo de Paz de La Habana. Por eso propone, por ejemplo, profundizar la sustitución de cultivos de uso ilícito y trabajar en la legalización de tierras. En ese aspecto, Vidal dijo que es necesario comenzar a titular masivamente los predios y revocar aquellos que fueron reconocidos ilegalmente, un tema en el que luchó el líder social Temístocles Machado.
El reto que tiene como alcalde es inmenso. En Buenaventura, el 81% de la población — 500.000 habitantes — vive bajo la línea de pobreza. Esta realidad motivó el Paro Cívico y seguramente fue clave en su elección. Transformarla y buscar que los ingresos del puerto — que moviliza un millón de contenedores al año — también se trasladen a la población, será una de las tareas más complejas que tendrá que asumir. Y en ese proceso de gobierno deberá sentarse a hablar con los partidos políticos tradicionales, pues no tiene mayorías en el concejo.
Ya como alcalde electo oficial de Buenaventura, Víctor Vidal nos otorgó una entrevista.
Alcalde, ¿cómo lee usted todo lo que pasó con el reconteo? Pasaron siete días y la Registraduría no decía nada. Hubo protestas, incluso.
Lo del reconteo siempre pasa en Buenaventura. El escrutinio siempre es complicado porque el margen de votos entre cada candidato es muy corto. También es que hay votos de las zonas rurales y todo eso se demora. Pero todo eso es normal, lo que generó malestar fue la presión en las redes sociales de algunos políticos que querían mostrar esta campaña como dudosa, eso sí.
Ahora, nosotros ganamos esta elección de una forma totalmente distinta, en la calle, sin las estrategias de las maquinarias, eso causa ruido. Muchas personas incrédulas no han querido aceptar nuestra victoria, pero bueno, eso es resultado también de lo sorpresivo que fue todo esto.
¿Pero se siente seguro? ¿Cómo piensa gobernar en un lugar donde la cultura política es tan complicada?
Si usted hace una encuesta en Buenaventura, podría darse cuenta de que por lo menos el 70% de los habitantes apoyan a Víctor Vidal, en buena medida porque él representa toda esa lucha del Paro Cívico, en la que estuvimos todos los bonaverenses. Hay un consenso mayoritario que hace que no me sienta solo. El mensaje es claro para la clase política, para los empresarios e incluso para los grupos ilegales. El gobierno nacional ya dijo que está dispuesto a trabajar con nosotros y la idea es que con los otros sectores políticos podamos llegar a acuerdos. Muchos de ellos, no se lo voy a negar, tienen que ver con las demandas del paro cívico.
Usted habló de un acuerdo de paz entre los grupos armados de Buenaventura, ¿cómo es eso?
Es una alternativa y necesitamos el apoyo del gobierno nacional. Es una idea en construcción porque nosotros creemos siempre que la paz es el camino. Siempre hay que buscarla mi hermano. Aquí hay varios actores vinculados al narcotráfico que extorsionan a la ciudadanía, que combaten entre ellos. Someterlos militarmente ha sido difícil, por eso nosotros queremos abrir una discusión con la academia, con las organizaciones internacionales, con las ONG de derechos humanos en Buenaventura para ver qué podemos hacer con esos jóvenes que están metidos en esos grupos, para ver cómo podemos dialogar.
¿Cómo va a comenzar a revertir esa situación de pobreza y desigualdad que padece Buenaventura?
La desigualdad y la inequidad no se pueden negar y tiene que ver con un tema de hace varios años, cuando algunas familias del Valle tomaron la actividad portuaria y no le dejaron nada a la población. Y a los que trabajan en esas empresas les dan muy malos tratos, hay una inestabilidad laboral y no hay condiciones dignas. Nosotros somos socios de esa actividad portuaria y por eso la Alcaldía va a estar presente para que se respeten a los trabajadores. También queremos que los que manejan el puerto entiendan que llegó la hora de distribuir las utilidades porque de lo contrario perdemos todos. ¿Cómo piensan subsistir económicamente cuando el territorio en el que trabajan hay tanta pobreza y tantos conflictos?
Le tocará sentarse con TC Buen y no será nada fácil…
La alcaldía tiene el 2% de TC Buen, ya sé que es solo un 2%, pero nosotros tenemos el derecho y la obligación de sentarnos en las juntas directivas para decidir. Todas esas discusiones las voy a dar.
También vi que dentro de sus propuestas estaba la titulación masiva de tierras…
Se venía haciendo un proceso de titulación masiva, algo por lo que don Temístocles Machado luchó mucho tiempo, pero se enredó por un tema legal. Lo que nosotros queremos es que el Concejo de la ciudad le dé la facultad al alcalde para titular las tierras, esta es la única manera en la que la gente puede obtener beneficios del Estado. Hay un problema de titulación, por ejemplo, con los programas de vivienda. La gente no puede acceder a las viviendas si no tiene los títulos. Tenemos que concentrarnos en formalizar.
Hace unos años se hablaba de La Empresa, Los Urabeños, hoy se habla de Los Peskaítos, de la Local, ¿cuál es el panorama de los grupos armados?
(Risas). Son los mismos de siempre hermano. Acá esos grupos armados tienen enlaces a nivel nacional y siempre los han tenido.
¿Por el narcotráfico?
Y por el control territorial. Hay una disputa fuerte desde años por eso.
¿Cómo va a intervenir usted en ese problema?
Desafortunadamente el alcalde no tiene mucho margen de acción ahí, pero lo que nosotros queremos es poner el tema de la paz con todos los actores: la Iglesia, las organizaciones sociales, la sociedad civil. Por ejemplo vea, acá no hay muchos cultivos de coca, pero hay que ofrecer alternativas, toca implementar el plan de sustitución. Nuestros compañeros del Consejo Comunitario del río Yurumanguí, por ejemplo, erradicaron la coca de manera autónoma. De ellos tenemos que aprender y escucharlos. Acá, de una vez digo, no va a haber glifosato, eso sí no.
¿Cómo va a sacar adelante los temas que están enredados en el paro cívico?
Vamos a tener disposición total. La anterior administración no la tuvo y por eso fue difícil llegar a hacer consensos y sacar temas adelante. Las mesas del paro han funcionado permanentemente, solo que a veces, como le decía, se retrasaban algunos temas porque era necesaria la voz de la alcaldía y no aparecía. En mi alcaldía estaremos 100% con el paro cívico, totalmente dispuestos. No tengo otra posibilidad: en las negociaciones del paro podrán disponer de los funcionarios de la alcaldía para que los acuerdos avancen. Solo así Buenaventura avanza.