Medellín, Cartagena, Buenaventura y Bogotá se unieron en homenaje al reclamante de tierras de Buenaventura.
“¡El pueblo no se rinde carajo!” A una sola voz, cinco mujeres provenientes de Buenaventura entonaron estas palabras, las mismas que Temístocles Machado gritó tantas veces en su vida, cuando salía a protestar en las calles de su barrio, Isla de la Paz, cuando viajaba a Chocó, cuando viajaba a Bogotá y se unía a las protestas. Con un megáfono en mano y una vela en la otra, Yudi, una de las manifestantes, invitó a todos los transeuntes que pasaban por la plazoleta del Rosario a unirse al acto simbólico que, además de rechazar el asesinato de Temístocles, busca rescatar su causa: la lucha por las tierras.
El acto simbólico trascendió las fronteras de Bogotá y fue replicado en las calles de Medellín, Buenaventura y Cartagena, donde se vieron velas alzadas al cielo a manera de agradecimiento y protesta.
Gladys Beltrán se define como “ciudadana del común, no soy de partidos, soy solidaria por los líderes sociales de este país, que están asesinando día a día, estoy con la paz y esta guerra duele mucho. Llegué aquí por el mensaje a través de las redes”. Como Gladys, muchas personas se acercaron y pidieron una vela. También hicieron presencia integrantes de partidos políticos, como se ve a continuación.
Un grupo de mujeres jóvenes llevó redoblantes, bombos y otros tambores para ambientar la protesta. Las mujeres del Proceso de Comunidades Negras (PCN), también se pronunciaron.
A la manifestación asistieron aproximadamente 100 personas, una cifra que variaba, pues algunos transeúntes se acercaban, escuchaban la oración por Temístocles, y luego se sentaban a lo lejos, escuchando las consignas del Paro Cívico de Buenaventura y la lista de líderes asesinados en el país.
El asesinato de Temístocles Machado también convocó a colectivos sociales que trabajan por los Derechos Humanos, el medio ambiente y el territorio. Temístocles, como lo contamos, fue uno de los líderes más visibles del Paro Cívico de Buenaventura y un guardián del barrio Isla de la Paz.
Al final de la jornada en Bogotá, las personas tomaron una flor blanca en una mano, una vela en la otra y repitieron: “el pueblo no se rinde carajo, que el pueblo se respeta carajo”.
A continuación les mostramos unas fotos que nos compartieron desde Medellín, donde más de 200 personas se reunieron alrededor del teatro Pablo Tobón Uribe.
Fotos en Medellín por: Federico Carranza Carvajal