Los colombianos respondieron cómo prefieren aportar a la construcción de paz. Estudio de Corpovisionarios.
¿Los colombianos queremos la paz?, ¿estamos dispuestos a trabajar por ella?, ¿cómo preferiríamos aportar a un eventual posconflicto? Esas son algunas de las preguntas que responde el último informe de Corpovisionarios, que dibuja un panorama general sobre la disposición que tenemos actualmente los colombianos de cara a participar en actividades de paz.
El muestreo dividió a los ciudadanos en cuatro perfiles: entusiastas, expectantes, apáticos y reticentes. Según el informe, un 22% de la población cree en el proceso de paz y participa activamente; un 35% se muestra inactivo pero se siente responsable con la construcción de paz y está dispuesto a actuar; un 27% no confía en el proceso y está poco dispuesto a participar en actividades de paz, y un 15% rechaza definitivamente el proceso y la posibilidad de involucrarse la construcción de paz.
Lo anterior quiere decir que 3 de cada 4 personas están, en algún nivel, dispuestas a participar en actividades para la paz y un 57% del país cree firmemente que las cosas mejorarán si se firma un acuerdo. Las encuestas, que se realizaron en diez capitales, determinaron también que en ninguna de ellas son mayoría quienes rechazan el proceso. Pasto, Barranquilla y Bucaramanga son las ciudades con mayor presencia de “entusiastas”, mientras que en Villavicencio y San José del Guaviare son las únicas donde triunfaron los “apáticos”.
¿En dónde es preferible apoyar?
Según el documento, 3 de cada 4 personas dispuestas a trabajar por la paz prefieren apoyar la participación local en temas de paz y el fortalecimiento de iniciativas comunitarias. Un porcentaje similar se siente cómodo con que su aporte sea compartir información relativa a la construcción de paz en redes sociales.
Respecto a los temas que más llaman la atención de cara a involucrarse en el posconflicto, puntea la educación, el medio ambiente y la salud, mientras que apenas a 1 de cada 4 le llamaría la atención trabajar en derechos humanos. De la tabla de temas, destaca que un 88% de la población no participaría en mejorar el desarrollo rural y a un 97% no le interesa apoyar la sustitución de cultivos.
Cuando se les preguntó a qué grupos específicos preferirían ayudar, los encuestados se decantaron por las víctimas del conflicto, haciendo énfasis en niños, mujeres y adultos mayores. Solo 1 de cada 4 trabajaría con miembros de la Fuerza Pública o con reinsertados. En esa misma sección el informe dice que el 92% de los ciudadanos no muestra interés por apoyar a minorías étnicas.
¿Por qué es baja la participación?
La participación en temas de paz, según el análisis de Corpovisionarios, ha sido baja hasta ahora. Dice el documento que el 36% de los ciudadanos ha participado en actividades culturales o deportivas, pero solo un 12% ha asistido a encuentros de este tipo que estén enfocados en la construcción de paz. Un 17% de la población ha salido a marchar, un 12% ha replicado o leído la página de la mesa de negociación y solo un 10% ha participado en talleres o encuentros por la paz.
El principal motivo por el que los colombianos no participan en actividades relacionadas con la paz es la falta de tiempo. Sin embargo, entre las razones por las que la mayoría creen que es difícil participar están “no ver que las decisiones se hacen realidad”, “la poca claridad de lo que se discute” y “la agresividad de las demás personas”. A pesar de esos reparos, 7 de cada 10 personas creen que la participación ciudadana sirve mucho o muchísimo, mientras que apenas 1 de cada 10 cree que no sirve de nada.
El informe, además, concluye que no existe una norma social fuerte asociada a la participación en actividades de construcción de paz. 3 de cada 4 personas creen que menos de la mitad de sus conocidos participarían en ese tipo de actividades. Ese mismo porcentaje cree que, si ellos no participaran, menos de la mitad de sus familiares y amigos les llamarían la atención por eso.
Finalmente, a los encuestados se les preguntó cómo imaginan el futuro después de los diálogos. Los campesinos son el grupo que se percibe que estará mejor si se firman los acuerdos: un 61% de personas lo creen. Por su parte, más de la mitad de la población cree que el país estará mejor tras los acuerdos, pero no confían tanto en la mejoría para el ámbito privado: un 55% piensa que tras la firma las cosas seguirán igual o peor para sus familias.