El 23 de enero se cumplen 22 años de la masacre. Las víctimas quieren que las Farc asistan a la conmemoración y les pidan perdón.
Apenas unos cuantos kilómetros separan el barrio Obrero de Apartadó de la Brigada XVII del Ejército en el municipio de Carepa, en el Urabá antioqueño. Esa distancia es, para las víctimas de la masacre de La Chinita, cometida por el V frente de las Farc, lo poco que los aleja de perdonar a sus victimarios.
Es que tras las rejas de esa guarnición militar se encuentra, bajo la protección del Ejército, Elda Neyis Mosquera, alias “Karina”. Esa mujer, cuya sentencia a más de 30 años de cárcel fue suspendida en 2009 por el gobierno de Álvaro Uribe para que actuara como gestora de paz, es la misma que, según algunos testigos, lideró el grupo que cometió la masacre,
Ese 23 de enero de 1994 las Farc cumplieron la amenaza que habían lanzado antes de la Navidad del año anterior. Dispararon contra decenas de personas para, supuestamente, cobrarle a los de desmovilizados del EPL que se habían asentado en esa zona de invasión, su “traición” a la revolución y a la lucha armada.
Las víctimas saben que no es fácil, porque la misma Mosquera ha dicho que es objetivo militar de las Farc, pero quieren que ella, quien nunca ha asumido la responsabilidad por esos hechos, esté presenté el próximo 23 de enero en la conmemoración de los 22 años de la masacre. Creen que escuchar a sus victimarios en el mismo lugar donde fueron asesinados sus familiares puede ser su aporte a la reconciliación.
Por medio de ¡PACIFISTA!, envían una carta a la delegación de paz de las Farc, en el proceso de negociación de La Habana, para que alguno de sus delegados también se haga presente en el acto conmemorativo en el que recordarán a las 35 víctimas que murieron cuando las Farc abrieron fuego contra las personas que participaban en una fiesta popular.
Barrio La Chinita-Obrero-Apartadó Antioquia, diciembre 27 de 2015
Señores negociadores FARC-EP, Mesa De Paz La Habana
Respetuoso saludo:
El antiguo barrio La Chinita, hoy barrio Obrero, está compuesto por 35.600 habitantes aproximadamente, quienes están catalogados como sujeto de reparación colectiva por la masacre de La Chinita.
Nuestra lucha por ser reconocidos como víctimas lleva 21 años y once meses. Un proceso que no ha sido fácil y durante el cual sufrimos persecuciones, desplazamientos, asesinatos y desapariciones. Proceso que, aunque ha sido doloroso, en ningún momento como víctimas desistimos en pensar que el mejor homenaje a nuestros seres queridos desaparecidos, y para las futuras generaciones es luchar por la paz.
Ese 23 de enero de 1994 se cegaron 35 vidas: ellos eran padres de familia, hijos, hermanos y esposos, que su única esperanza era tener casa propia. Ellos en su manos solo habían empuñado una gurbia o un cuaderno.
Hoy, con tesón y unión, nuestra comunidad ha prosperado con el liderazgo de Asovima y la Junta de Acción Comunal del barrio Obrero, y así hemos logrado el apoyo de los diferentes estamentos del Estado para salir adelante.
En estas más dos décadas, nunca hemos olvidado ni olvidaremos los hechos, pero también tuvimos tiempo para limpiar en nuestros corazones el odio y el rencor.
El 23 de enero se cumple un año más de no tener a nuestros seres queridos. Sentimos que el mejor homenaje a esas 35 personas es aportar nuestro perdón en el proceso de paz; sin embargo, este de nada sirve para construir la Colombia soñada, si no existe un verdadero y sentido acto de contrición por parte de los victimarios. Ningún niño, joven, mujer u hombre del barrio desconoce que esa noche quienes apretaron el gatillo que cegó esas vidas fueron miembros del quinto frente de las Farc.
La próxima fecha de conmemoración de la masacre coincide con las negociaciones del último punto faltante para la firma del tan anhelado Acuerdo de Paz.
Con el fin de empezar a construir una Colombia soñada, nosotros las victimas solicitamos la presencia de delegados de las FARC para el 23 de enero de 2016 y así limpiar los últimos rezagos de lo vivido en el pasado de nuestros corazones. Y en un acto, juntos, podamos sentir su deseo de no repetición y ustedes sientan en sus corazones nuestro perdón.
El perdón solo lo concede Dios, pero nos iluminó con su ejemplo en la cruz para otorgarlo.
Para nosotros como víctimas esto se logrará con el proceso de negociación del conflicto en Colombia, es por ello que extendemos nuestra solicitud para que asistan al acto de conmemoración de la masacre La Chinita.
Contacto
Asociación de Víctimas de Antioquia Asovima
Sede principal: barrio Obrero bloque 01 manzana 95 casa 01 segundo piso Apartadó
Teléfono: 826 13 81 – Celular: 311 601 15 21
Correo Electrónico: asovimaapartado@gmaill.com
Junta de Acción Comunal Barrió Obrero
Teléfono: 826 39 92 – Celular: 311 787 10 79
Correo Electrónico: juntaobrero@hotmail.com