¿El Tarra está vetado para los periodistas? | ¡PACIFISTA!
¿El Tarra está vetado para los periodistas?
Leer

¿El Tarra está vetado para los periodistas?

Staff ¡Pacifista! - mayo 24, 2016

Siete reporteros fueron retenidos y hostigados. La FLIP recomendó no enviar comunicadores al área.

Compartir
En el municipio de El Tarra, Norte de Santander, han sido retenidos ocho periodistas en los últimos días.

Pese a que desde el pasado domingo el Ministerio de Defensa anunció que había desplegado operativos militares en el Catatumbo para encontrar a Salud Hernández, en la mañana de este martes la Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP) y la Defensoría del Pueblo alertaron sobre la retención ilegal de varios periodistas en el corregimiento Filo El Gringo, del municipio El Tarra (Norte de Santander) –donde Hernández fue vista por última vez–.

Se trata de la detención ilegal del reportero Diego Velosa y el camarógrafo William Mora, de la cadena Caracol, y de la periodista Solai García y otro comunicador de la región.

Según el relato de Velosa en la emisora Blu Radio, los cuatro fueron abordados por hombres que se identificaron como guerrilleros del ELN e internados por una trocha, donde les quitaron los celulares, un trípode, un computador, una cámara de video, una lámpara y otros equipos que estaban usando en el desarrollo de su trabajo periodístico.

Horas después, el grupo de comunicadores fue liberado y llegó en buenas condiciones al casco urbano de El Tarra. No obstante, las autoridades de ese municipio informaron que el ELN aún mantiene retenidos al periodista Diego D’ Pablos y al camarógrafo Carlos Melo, ambos del canal RCN, además de a un comunicador que le presta servicios a la agencia EFE. Según Velosa, varias personas de El Tarra se han intentado comunicar vía telefónica con el equipo periodístico de RCN, pero no han tenido suerte.

Vea también: La zona donde desapareció Salud Hernández es de alto riesgo para el periodismo

Ante esa situación, el presidente Juan Manuel Santos les ordenó al director de la Policía, general Jorge Hernando Nieto, y al comandante del Ejército, general Alberto José Mejía, que se trasladaran al Catatumbo para dirigir personalmente las operaciones. En la tarde del lunes, según declararon los liberados, ninguna autoridad militar o de policía se encontraba en Filo El Gringo, donde tuvieron lugar las retenciones.

Todos los grupos de reporteros, que habían salido desde Ocaña y desde Tibú, se habían desplazado a la zona para indagar por el paradero de Salud Hernández, de la que no se tienen noticias desde el pasado sábado, cuando habría tomado un mototaxi rumbo a Filo El Gringo para, posteriormente, haber sido retenida. Justamente, después de entrevistar a los campesinos sobre ese tema, la guerrilla retuvo a los seis periodistas y les “decomisó” sus equipos.

En conversación con Blu Radio, Velosa reveló que durante su trabajo de reportería los pobladores de la región le contaron que Hernández había utilizado “un lenguaje bastante pesado para ellos. Esta es una zona de milicianos y de guerrilleros del ELN que actúan muy sigilosamente haciendo investigaciones y tal parece que desde esas palabras que ella pronunció uno de estos hombres la llevó hasta un sitio conocido como Filo El Gringo”. Durante los últimos meses, y desde su columna de opinión en el diario El Tiempo, Hernández ha cuestionado duramente al ELN por el secuestro de varias personas, entre ellas el del entonces consejero de la Gobernación de Norte de Santander Ramón Cabrales.

Velosa también dijo que “dentro de la investigación que he hecho me atrevería a decir que ella sí está retenida por del ELN”, cuyos milicianos se movilizan constantemente en motocicletas por las áreas rurales y urbanas del Catatumbo. Al respecto, Frank Pearl, jefe negociador del Gobierno para los diálogos con esa guerrilla, dijo a través de Twitter que “si el ELN secuestró a Salud Hernández, Diego D’ Pablos y Carlos Melo, debe liberarlos cuanto antes”. La guerrilla, por su parte, no se ha pronunciado.

Los hechos de los últimos días parecen dar a entender que El Tarra está vetado para los periodistas, quienes para movilizarse tranquilamente por la zona deben “pedirle permiso” al ELN o al EPL. La coacción para la prensa es de tal magnitud que la FLIP hizo “un llamado a los medios de comunicación para evaluar con cuidado la situación y abstenerse de enviar periodistas a la zona si no cuentan con protocolos de protección para garantizar la seguridad de los corresponsales”.

La Fundación también insistió “en la exigencia de libertad inmediata y retorno de los periodistas al ejercicio de su oficio sin condiciones, velando por la vida e integridad de los reporteros”, y solicitó “acatar las normas del Derecho Internacional Humanitario, dentro de las cuales se advierte que los periodistas son civiles que no participan de las hostilidades y que cualquier agresión contra ellos es una violación grave”.

La Defensoría del Pueblo, por su parte, dijo que la retención de los comunicadores es “una evidente e inaceptable agresión a los derechos humanos y a la libertad de prensa, frente a lo cual expresa su enérgico rechazo y solidaridad con los afectados”.

Por ahora se desconoce el paradero de los tres reporteros que fueron retenidos el lunes y de la columnista y periodista Salud Hernández. Mientras las autoridades los buscan, la información es cada vez más confusa por el temor de los pobladores y la coacción a la prensa.