Cientos de estudiantes marcharon ayer en la Plaza de Bolívar. Estas son sus peticiones.
Este artículo hace parte de Divergentes, un proyecto sobre movilización y organizaciones sociales. Para ver todos los contenidos haga clic acá.
Este miércoles 5 de septiembre, a las tres de la tarde, cuando en el Congreso se desarrollaba el primer debate de control político por los asesinatos contra los líderes sociales, varios colectivos estudiantiles se tomaron la Plaza de Bolívar a manera de protesta pacífica.
Los estudiantes que se movilizaron venían tanto de universidades públicas como privadas: la Pedagógica, la Nacional, la Distrital, la Javeriana, entre otras. Había banderas, carteles, afiches y un muñeco con la cara de Iván Duque. Los estudiantes cantaban arengas clásicas como “¿Quién es usted?…Soy estudiante” y “resistencia, resistencia”. También se escucharon otras menos habituales como “viva la universidad, no la dejes privatizar”, “ser pilo no paga, lo público se acaba” y “Duque, responda, nos están matando”.
“Además de manifestarnos contra la violencia a los líderes sociales —contó Jaider, uno de los estudiantes que estuvo en la manifestación — vinimos a exigir que exista una universidad pública y de calidad para cualquier persona, y también a decir que no queremos más Icetex que es una carga, ni el Sistema de Financiación Contingente al Ingreso ni Ser Pilo Paga. Tampoco queremos que sigan desfinanciando las universidades y recortándoles el presupuesto”.
Iván Duque, en campaña, hizo propuestas para darle posibles soluciones a la financiación de los créditos del Icetex, e incluso aseguró que esta entidad debía condonar al menos parcialmente las deudas de los estudiantes si estos demostraban ser sobresalientes. A la fecha, cientos de beneficiarios le deben al Icetex más de 325 mil millones de pesos.
Los estudiantes fueron claros: la educación debe ser un derecho, no un negocio. El llamado al gobierno también fue muy específico: la educación pública, tanto media como superior, necesitan recursos y respaldo institucional. El gobierno Duque, por el momento, quiere demostrar que está comprometido con los estudiantes destinando 38,7 billones de pesos para el sector de la educación en 2019, una cifra superior a la de cualquier otra cartera.
Hoy estoy en el debate en la Cámara sobre el sistemático exterminio de las y los líderes sociales. Pero salí un momento a la Plaza de Bolívar a saludar a miles de jóvenes estudiantes que exigen educación pública gratuita y de calidad: pic.twitter.com/Qdl0ObfnQX
— Iván Cepeda Castro (@IvanCepedaCast) September 5, 2018
Lina Mendoza, una de las representantes del movimiento estudiantil de Bogotá, explicó que una de las motivaciones para la concentración fue la reivindicación de los movimientos estudiantiles en Colombia. “Tenemos este deber con la comunidad estudiantil entera, independiente de su origen o si son de universidad privada o pública. Queremos hacerle un reclamo al gobierno que está desfinanciando a la educación pública y le está dando más recursos a las privadas con programas como Ser Pilo Paga. También queremos quejarnos del asesinato a líderes sociales”, dijo.
La manifestación terminó con la presencia del Esmad después de que algunas personas encapuchadas comenzaran a lanzar piedras. Según los colectivos de estudiantes, estas personas “no hacían parte de la manifestación”, pero esto hizo que la multitud se dispersara y la plaza quedara vacía por completo. Unas horas más tarde, la ministra de educación entregó las primeras declaraciones sobre lo que parece ser el fin de Ser Pilo Paga.
¿Fin de Ser Pilo Paga?
Una de las primeras reformas del Ministerio de Educación en la era Duque va a ser modificar el programa Ser Pilo Paga, creado por el gobierno de Juan Manuel Santos, el cual consiste en entregar becas completas en cualquier universidad de Colombia a los mejores estudiantes de los colegios oficiales. Después de tres años de implementarse, cerca de 40.000 estudiantes accedieron a la educación superior a través de este programa.
Aunque este programa recibió elogios, también fue duramente criticado por los sindicatos y los defensores de las universidades públicas. El argumento contra el programa no ha variado: la mayoría de becados se va a universidad privadas, y el Estado, a través de Ser Pilo Paga, termina inyectándoles recursos, dejando a la deriva a las 32 universidades públicas del país, que hoy sostienen una deuda cercana a los 18 billones de pesos.
Según la ministra de Educación, María Victoria Angulo, se necesitan dos billones de pesos para continuar financiando las becas de los 40.000 estudiantes que están en Ser Pilo Paga. Además, el Icetex tiene un déficit de 780 mil millones de pesos. Por cuestiones presupuestales, Angulo dijo que el programa Ser Pilo Paga tiene que ser replanteado, de lo contrario, seguirá absorbiendo el 50 por ciento de los recursos destinados a la educación superior. Se espera que en las próximas semanas la ministra presente una nueva propuesta que también represente un alivio para las universidades públicas.
En estos momentos, el gobierno está trabajando en el presupuesto para 2019. En este marco, dijo la ministra, “estamos diseñando un nuevo programa de educación superior, en el que no solo se tendrán en cuenta los criterios de mérito sino que se le apuntará a la equidad y a fortalecer la educación pública”. ¿Qué tan cercana será la propuesta de Duque con las demandas del movimiento estudiantil? Eso está por verse.