El 18 de marzo de 2024, el Presidente Gustavo Petro renovó su invitación a las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC) grupo armado también conocido como el Clan del Golfo, para negociar, tras advertir que lanzaría una ofensiva si no mostraban interés en el diálogo.
El ahora conocido como Ejército Gaitanistas de Colombia (EGC), es el grupo armado ilegal más poderoso del país y representa uno de los mayores desafíos para el presidente Gustavo Petro en su proyecto de Paz Total. El jueves 2 de mayo las AGC hicieron una petición al presidente de la República para pedir una suspensión de los órdenes de capturas y extradiciones contra miembros del Estado Mayor. Según Ricardo Giraldo, abogado de las AGC: “ya tienen la respuesta que tanto habían solicitado, el balón nuevamente en manos suyas presidente” (Twitter/X).
El cambio de nombre de las AGC a EGC, cambiando la palabra Autodefensas por Ejército, se debe a desligarse de su origen y participar en la Paz Total del gobierno de Gustavo Petro. El 24 de febrero del 2024 se publicó un vídeo donde el grupo armado aseguró que sus intenciones eran contribuir con la paz total. Sin embargo, hasta ahora ha habido pocos intentos de acercamiento por parte del grupo y el gobierno.
Nivel de hostilidades y panorama de los conflictos armados con el EGC
El grupo armado está implicado en diversos enfrentamientos con el Estado y otros grupos armados ilegales. Según el Informe ‘Balance Humanitario 2024’ del CICR, los conflictos en Colombia han aumentado de 7 a 8. Entre estos, se destaca un nuevo conflicto entre el EGC y el Estado Mayor Central. Además, se señala que el EGC está involucrado en otros 2 conflictos armados en curso, siendo uno de estos con el ELN.
Carlos Espitia, investigador en Indepaz, nos brinda los distintos conflictos y la reconfiguración territorial del conflicto armado posterior al Acuerdo de Paz de 2016.
“Tenemos uno en Chocó con el EGC y ELN, digamos allá hay denuncias de complicidad con la fuerza pública y el EGC, lo que les ha permitido un rápido avance en el departamento del Chocó, particularmente de Norte a Sur.”
“Tenemos otro escenario de confrontación que ocurre en la región Norte Antioquia, del Sur de Bolívar y que alcanza al Magdalena Medio. Allí se presentaron hace unos años algunas confrontaciones, particularmente con una disidencia del EGC, con los Caparrós.”
“Actualmente, hay esas estructuras que surgen como disidentes de las Farc, particularmente el Frente 33 y el Frente 18, y allí lo que termina ocurriendo por cuestiones estratégicas y sabiendo el poder de las AGC, es una alianza entre estas disidencias de las FARC que están ahora organizadas ahora en el bloque del Magdalena Medio con el Estado Mayor Central y el ELN para contener los avances del EGC.”
“Las AGC están actualmente en contra del ELN, particularmente en Cúcuta y en esta zona de frontera con Venezuela. La intención de las AGC era conectar la región del Pacífico de Colombia hasta las fronteras con Venezuela. Tuvieron un avance significativo inicialmente, pero lo que se conoce actualmente es que el ELN logró controlar esa intención de avance de las AGC.”
Elizabeth Dickinson, investigadora en International Crisis Group, nos afirma “que a pesar del proceso de paz en camino, con las Mesas de Negociación, realmente tenemos un nivel de afectación hacia la población civil totalmente inaceptable”.
Expectativas del EGC :
El 2 de mayo, las AGC/EGC, hicieron una solicitud al presidente Gustavo Petro. Entre las condiciones, se incluyó la suspensión de las órdenes de captura y extradiciones contra miembros del Estado Mayor.
El informe del International Crisis Group señala que los Gaitanistas tenían altas “expectativas” en Petro, pero expresaron sentirse decepcionados y “engañados”. Además, el informe explica que buscan obtener “el perdón social” como una vía para reintegrarse a la vida civil.
Ricardo Giraldo, representante legal del EGC, ha manifestado en varias entrevistas la disposición del grupo para iniciar conversaciones de paz con el Estado. Durante una entrevista con El Espectador, señaló que un obstáculo para dichas conversaciones es la falta de reconocimiento de los estatutos políticos del EGC.
Esta carencia de reconocimiento podría complicar las negociaciones dentro del marco legal establecido por la ley de Paz Total. Además, Giraldo afirmó que el EGC “no se va a someter”. En cuanto a la agenda política, explicó que esta implica la participación de las comunidades y líderes locales y regionales de cada bloque o frente. Según Carlos Espitia, “No se conoce mucho sobre la intención de establecer una agenda o algo similar”.
Avances :
Hasta ahora, no hubo mesa de negociación con ambas partes. No hay cese al fuego con el gobierno nacional y tampoco con los otros grupos armados. Sin embargo, las dos partes están dispuestas a intentar un acercamiento y reuniones para empezar un diálogo.
Ley de Paz Total y diferencias entre grupos armados :
La Ley 2272 de Paz Total establece un marco legal para las negociaciones con grupos armados, dividiéndolos en dos categorías distintas:
- “Negociaciones con grupos armados organizados al margen de la ley con los que se adelanten diálogos de carácter político, en los que se pacten acuerdos de paz.” El gobierno nacional calificó, por ejemplo, el ELN y EMC (una de las disidencias de las FARC) como grupos políticos.
- “Acercamientos y conversaciones con grupos armados organizados o estructuras armadas organizadas de crimen de alto impacto, con el fin de lograr su sometimiento a la justicia y desmantelamiento”. El EGC, según el gobierno, pertenece a este segundo tipo de grupo armado.
Las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC) buscan ser reconocidas como un grupo político y ser clasificadas en la primera categoría. Como afirmó Ricardo Giraldo, “no se van a someter”. Según Carlos Espita, las AGC cambiaron su nombre a Ejército Gaitanista de Colombia (EGC) con este propósito. También, él nos dice que “ese reconocimiento en términos de proceso de negociación, en términos prácticos de lo que significa penalmente, todo esto, resulta más un obstáculo que le pueda significar al mismo proceso de paz, al mismo desarrollo del proceso de negociación”.
Elizabeth Dickinson nos afirma también que ese debate es un obstáculo.“Pero en realidad, es un dilema falso entre los grupos políticos y no políticos. Lo que tenemos hoy es una zona gris donde operan todos los actores armados que tienen más que todo intereses con económicos locales dirigidos a lógicas de controlar territorios, rutas, ingresos, mineras, narcotráficos y todo los otros tipos de rentas lo cual confiere a los insurgentes en criminales y los criminales en políticos.”
Recomendaciones :
Elizabeth Dickison respondió a nuestra pregunta : ¿Cuáles serían las recomendaciones para avanzar hacia un proceso de paz con este grupo?
“El diálogo con el EGC. La prioridad es abrir un canal, establecer confianza entre las partes, que hace mucha falta, armar la capacidad para poder intercambiar, por ejemplo, para desescalar situaciones urgentes humanitarias y con la base de poder tener una interlocución. Primero sería averiguar las expectativas de la organización armada, en el marco de la paz para realmente tomar el pulso que buscan en la mesa, qué incentivos tienen para llegar, como es su concepción para así determinar si hay alguna posibilidad de avanzar con una mesa de negociación.”
“Después de eso se requiere algunos restos por parte de las AGC, sobre todo para demostrar su voluntad de paz. Para nosotros el foco estaría en la reducción de violencia en los territorios. Ellos pueden asegurar acceso a los oficiales del Estado, a la zonas controladas por ellos, dejar de confinar, reducir las amenazas contra los líderes sociales.”
“Entonces la confianza se va construyendo, los restos van cada vez incrementando. En este momento y solo en este momento, si hay una confianza y se demuestra, realmente la voluntad de paz por parte del grupo armado se puede contemplar reducciones graduales ilimitadas en los procesos militares con el fin de reducir el daño a la población civil. Todo eso sería como una introducción a un proceso, que sin duda va a ser muy largo y requiere un marco legal que le toca organizar al congreso. Entonces avanzar más allá de lo humanitario y digamos los pactos parciales de reducir violencia depende realmente del marco legal y la capacidad del congreso a pasar una ley de sometimiento a las condiciones para una desmovilización.”
Las AGC o EGC representan el mayor desafío para la apuesta de Paz Total del presidente Gustavo Petro. Este grupo se destaca como el más poderoso y, sin embargo, ha logrado pocos avances en los diálogos de paz. Su papel como actor central en el conflicto armado y sus impactos significativos en la población civil representan una gran amenaza. Las actividades económicas ilícitas del grupo son un obstáculo fundamental para alcanzar la paz total. La falta de participación del Ejército Gaitanistas de Colombia (EGC) en el proceso de Paz Total podría resultar en su dominio exclusivo del control territorial y de las economías ilegales, lo que pondría en peligro los acuerdos alcanzados con otros grupos armados.
