Hace eco en nuestra conciencia la frase "Arrepentidos de votar por Petro" que la derecha colombiana lanzó como granada sobre el 50.47% que respaldó al actual presidente. Más allá de la acusación de arrepentimiento, nos sumamos a la conversación desde nuestra perspectiva Pacifista.
Por: María Andrea Parra y Nicolás Maldonado
Decidimos ponerle un nombre más elegante, la “tusa política”, un sentimiento similar al que experimentamos cuando el NO triunfó en el Referendo por la Paz. Nos encontramos entristecidos y decepcionados por los múltiples desafíos y escándalos que han empañado este gobierno. Las promesas de cambio, en ocasiones, parecen verse eclipsadas por alianzas dudosas, errores de gestión, terquedades, populismos, novelones, dramas, desinformación y decisiones que, a pesar de buenas intenciones, reflejan fallas en su implementación.
Hace unos días publicamos en nuestras redes un contenido sobre la Tusa Política (hagan clic aquí para escuchar la playlist que les hicimos con mucho amor), y acompañamos a Buenaventura Paz, a reflexionar sobre toda esta situación. Aquí una de sus ideas:
(Si quieren leer el cómic completo vayan a nuestras redes y ahí lo verán. Pero por ahora, sigamos)
Buenaventura está triste, y nosotros nos achantamos junto a ella dejando claro que desde nuestro enfoque como medio independiente, que aboga por los derechos humanos y la paz, no nos arrepentimos de haberle apostado a un cambio. Y aunque todo se ve turbio, también creemos que hay un camino.
Hace unos días preguntamos a nuestra comunidad en las redes sociales si están “arrepentidos de votar por Petro”. Nos encontramos diversas opiniones que abarcan desde quienes valoran los cambios logrados hasta quienes señalan errores en la ejecución.
“Tampoco me arrepiento. Me gusta lo que ha pasado hasta el momento”
“Tienen sus grandes errores en la ejecución”
“No se puede idealizar a un mandatario”
En este punto, una respuesta destaca:
“Ocultan todo el buen trabajo del Gobierno y se apuñalan a sí mismos con tanta mentira.”
Aquí se subraya la percepción de tergiversaciones y críticas excesivas que pueden eclipsar los logros del gobierno y enmascarar los aspectos positivos. ¿Pero qué tan cierto es esto? La verdad es que esta respuesta se encuentra entre grises.
Por un lado, de la misma forma en como hace unos meses corrieron cadenas alarmistas sobre un posible terremoto tras los temblores que marearon a Colombia; de igual manera es posible ver cómo se ha venido utilizando el miedo para agrandar los problemas.
Recordemos las cadenas de whatsapp durante el referendo por la Paz que enlistaban barbaridades como estas:
*(No estamos llorando, es que se nos metió NO en el ojo). Sin comentarios.
Existen personajes y ramas políticas que aprovechan la vulnerabilidad civil y el acceso a la desinformación para sembrar miedo en los colombianos y vencer a punta de mendacidades; y aceptémoslo, este Gobierno y el Presidente han dado infinidad de papayasos para que les lluevan las críticas. Papayas servidas en bandeja de plata.
Pero bueno, vamos por partes.
Primero, decir que el país está en crisis resulta redundante. Es comparable a afirmar tener “una uña un uñero”, “subir pa’ arriba”, “bajar pa’ abajo”; decir que el país está en crisis es desafortunadamente, una lectura común de la situación de Colombia.
No obstante, dado que estamos bajo un gobierno alternativo, bajo el primer gobierno progresista en la historia del país, existe una maquinaria que aviva cualquier error de la gestión actual. Y no hace falta decir nombres propios sobre quiénes aprovechan todo tipo de imprecisiones para avivar el avispero, aquí hay expertos en meter cizaña.
Hablemos primero de esos errores, de esos papayasos del Presidente que han servido como carnada para disminuir las esperanzas del pueblo colombiano frente a un cambio:
1. El hijo no criado y la plata sucia de su campaña:
Uno de los momentos más oscuros que ha ensombrecido la imagen del Presidente fue el escándalo de financiación de su campaña y el entramado de relaciones turbias que emergió gracias a Nicolás Petro Burgos, su hijo no criado. La revelación de que el hijo del presidente disfrutaba de un estilo de vida desproporcionado gracias la platica que le daban fuentes cuestionables como narcotraficantes, ex paramilitares y corruptos, levantó interrogantes sobre la integridad de la campaña presidencial y la relación del mandatario con figuras de dudosa reputación. Este asunto, que actualmente está bajo investigación, plantea dudas legítimas sobre la transparencia y la legalidad del proceso electoral. ¡Qué tusa tan dura! La que nos daría si al final del meollo el presidente resultara conocedor de estos dineros dentro de su campaña. Estamos asustados, y a eso se le suma el notición de hace un par de días, cuando Nicolás Petro afirmó ante la fiscalía que su padre era un total conocedor del financiamiento de su campaña por parte de Euclides Torres. ¿Qué nos queda? En pocas palabras esperar a las pruebas.
*No sobra hacer la salvedad de que el fiscal actual Francisco Barbosa es abiertamente amigo de Iván Duque. Es muy problemático el hecho de que la entidad que esclarece el caso, esté en cabeza de un personaje que no es independiente, sino que es cercano a la oposición.
2. El melodrama ministerial:
Ahora hablemos de la inestabilidad ministerial que ha caracterizado al Gobierno. Si existiera un carnaval político, sin duda Petro podría llevarse el trofeo con una rotación significativa en su gabinete, despidiendo a 11 de los 18 ministros en menos de un año. Un rápido recorderis: La terquedad de Carolina Corcho frente las sugerencias a la Reforma de Salud, las peleas con Alejandro Gaviria, la pisada de mangueras y contradicciones entre la Ex-Ministra de Minas, Irene Vélez y el Ex-Ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo sobre asuntos de la exploración de petróleo y gas, y ni hablar de la fracesita que le puso los pelos de punta a Colombia:
“Ministro que no haga caso, se va”.
Gracias Presidente por tanta conciliación.
Todos estos rollos y la constante fluctuación ha generado una falta de cohesión interna, socavando la efectividad de la administración y planteando interrogantes en el país sobre la estabilidad política a largo plazo.
3. Una coalición que se fue al carajo:
A pesar de los esfuerzos de Petro por formar alianzas sólidas con partidos tradicionales y sopesar así los miedos frente a una posible “tiranía castrochavista”, las coaliciones se desmoronaron rápidamente debido a la falta de consenso interno y a la pérdida de respaldo por parte de los partidos. Esto al final dejó en evidencia dificultades para generar apoyo político sostenible y lo más preocupante es que sin el apoyo de esos partidos, resulta casi imposible aprobar reformas en el Congreso.
4. Novelón Sarabia – Benedetti:
Y ni hablar del escándalo que nos regalaron los audios de whatsapp compartidos con tanto amor entre Laura Sarabia y Armando Benedetti. Estos dramas en el Congreso terminaron por hundir o paralizar proyectos legislativos muy importantes que se estaban dialogando cuando sucedió este escándalo, como la Reforma Laboral, la Ley de Sometimiento y el Proyecto de Humanización Carcelaria, y la Regularización del Cannabis de uso Adulto. Estos proyectos que consideramos importantes y que tiene un fondo positivo, terminaron caídos porque ya cuesta creer en un proyecto impulsado por un Gobierno que sale con este tipo de sorpresas y que no tiene una coalición.
5. Paila, nos mintieron con las promesas de meritocracia:
Algo que sin duda nos tiene rayados a todos, son los nombramientos a dedo que por algún momento confiamos que no pasarían. Pero tanto Petro como la misma Verónica Alcocer se han encargado de llenar el Gobierno de personas sin experiencia (no todos por supuesto); pero bastan algunos casos fatales como Concha Baracaldo y Eva Ferrer, para que estas decisiones afecten la credibilidad tanto nacional como internacional del país y su capacidad para representar sus intereses en el ámbito global.
Y sí, ya nos dijeron algunos de ustedes que “no se puede idealizar a ningún mandatario”, sabemos que ninguna administración está exenta de errores y desafíos, pero es que nos prometieron el cambio, y todas estas enlodadas son la misma politiquería de siempre.
Pero bueno, pasemos a hablar de las cosas buenas y llenémonos de un poquito de esperanza
Resulta destacable poner atención a aspectos de relevancia que han sido discutidos intensamente en la esfera pública. Estos temas incluyen cuestiones culturales, raciales y clasistas que han forjado nuestra identidad nacional.
1. Una clara intención de Paz Total
Por primera vez en la historia, se logra un cese al fuego bilateral con el ELN y varios ciclos de diálogos. En el cierre del cuarto ciclo, los 5 acuerdos resultantes fueron: 1. Crear zonas humanitarias 2. Establecer proyectos de desarrollo. 3. Avanzar en más iniciativas del Acuerdo de Paz. 4. Difusión de los avances del proceso de paz en RTVC (Señal Colombia) y 5. Pedagogía en las zonas donde se adelanta el Cese al Fuego Bilateral. Así como unas innegables intenciones de Mesas de Diálogo con la disidencia de las FARC Estado Mayor Central y un celebrado cese al fuego bilateral desde el 22 de septiembre, marcando así un hito en la búsqueda de la paz (que es eclipsado por los incumplimientos que no dejan de generarnos indignación, pero reconocemos la importancia de los logros). Asimismo, se otorga prioridad a la participación ciudadana a través de voceros de diversos sectores que contribuyen en la verificación y monitoreo, con la colaboración de organismos multilaterales. Además, el diálogo social ocupa un lugar central en la formulación de políticas que realmente satisfagan las necesidades del país.
2. La Reforma Agraria
En el ámbito de la Reforma Agraria, el gobierno de Petro ha dado pasos significativos hacia la cumplimentación de sus objetivos. Un logro destacable es la entrega de tierras productivas a víctimas del conflicto armado y a comunidades vulnerables incluyendo a los pueblos indígenas, afrodescendientes y campesinos. Este paso es fundamental, ya que refleja el compromiso con la implementación de la Reforma Rural Integral, una de las promesas fundamentales del Acuerdo de Paz. El plan trasciende las barreras políticas al buscar adquirir 3 millones de hectáreas y establecer diálogos constructivos con figuras como José Félix Lafaurie, presidente de Fedegan y cercano al Centro Democrático. Esto demuestra que por encima de las diferencias políticas, prevalece el bienestar de las familias y la realización de la reforma.
Cumpliéndose un año de gobierno, se han adquirido 30,000 hectáreas, y aunque su ambiciosa meta anual es de 500,000 es evidente la intención por aproximarse a las métricas propuestas. Este hecho subraya el compromiso y la celeridad en la implementación de cambios reales en el tejido rural colombiano, y da un paso adelante en la creación de una sociedad más equitativa, en la que el campesinado es reconocido como un grupo merecedor de protección constitucional. Entre otros asuntos destacables de la reforma está la integración de firmantes de paz en los proyectos productivos que surgen de esta reforma, tal como lo dijo Gerardo Vega, Director de la Agencia Nacional de Tierras.
3. Perspectiva más humana
Los esfuerzos para compensar las carencias en educación superior pública, la revisión de la lucha contra las drogas y el cambio de enfoque en la deforestación, representan compromisos hacia una perspectiva más humana, basada en la ciencia y el conocimiento experto. La implementación de una reforma laboral acorde a los estándares internacionales de la Organización Internacional del Trabajo, así como el respaldo de entidades como el Banco Mundial y la OCDE a cambios en la reforma pensional, subrayan la profundidad y fundamentación de estas medidas, estamos en un periodo de transición lo que significa que el país puede mejorar, pero también significa que no será facil gestionar esos cambios.
4. Sistema Nacional de Búsqueda
Otro punto reciente que queremos celebrar es la creación del Sistema Nacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas, donde se unen las fuerzas de la Unidad de Búsqueda (UBPD), la JEP, el Ministerio de Justicia y Defensa y varias fundaciones de familiares de desaparecidos, en pro de la búsqueda y la justicia.
5. Resolución 1325 Plan de Acción Mujeres, Paz y Seguridad
“Luego de 22 años de implementada la Resolución 1325 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, el país recibió el anuncio de la formulación, implementación y seguimiento de un Plan de Acción Nacional de la Resolución 1325 (PAN1325), como resultado del trabajo histórico e incansable de las organizaciones de mujeres y feministas en el marco del compromiso del Gobierno Nacional por incorporar de manera efectiva una agenda de mujeres, paz y seguridad.” – Onu Mujeres Colombia
Los días 28 y 29 de septiembre marcaron la presentación de las ocho líneas temáticas que conformarán el Plan de Acción Mujeres, Paz y Seguridad. Este plan es resultado de la colaboración entre el Gobierno Nacional y el Comité de Impulso (compuesto por 16 organizaciones de mujeres feministas) que supervisan la implementación de la Resolución 1325 de las Naciones Unidas.
En este proceso participativo, más de 1.000 mujeres diversas de todo el país, representantes de diversas organizaciones de mujeres, se unieron en foros regionales, poblacionales y temáticos, además de un foro nacional. Cabe destacar que estos encuentros contaron con la activa participación de mujeres indígenas, afrodescendientes, palenqueras, raizales, Rrom, mestizas, campesinas, mujeres LGBTI, activistas, personas con discapacidad, urbanas y académicas de todos los departamentos del país. Su contribución fue sido fundamental para asegurar que el Plan de Acción Nacional 1325 tenga un enfoque territorial, etario e interseccional, reconociendo el valioso aporte que las organizaciones de mujeres ya han realizado en este ámbito y valorando especialmente su papel como actoras clave en la consolidación de la paz integral.
6. Acto de excusas a las madres y familiares de los mal llamados “falsos positivos” de Bogotá y Soacha
Dentro de la perspectiva más humana que consideramos caracteriza el Gobierno, entra el pasado acto de Excusas Públicas liderado por el Ministro de Defensa y Gustavo Petro hacia las madres de la organización MAFAPO (Madres de los Falsos Positivos). El pasado martes 3 de octubre, en un conmovedor acto de memoria, la plaza de bolívar se llenó de las madres que hablaron abiertamente al público y que, si bien agradecieron el perdón por parte del Gobierno, aclamaron que no son ellos quienes deberían estar allí, sino Álvaro Uribe y Juan Manuel Santos quienes en ese entonces eran Presidente y Ministro de Defensa respectivamente. Sin embargo, otorgar este acto de pronunciamiento y hacer mediático el tema de los falsos positivos es sin duda un aspecto de aplaudirle al actual gobernante.
*Ñapa: (CONFLICTO PALESTINA – ISRAEL)
El reciente conflicto entre ambos países en medio oriente ha desatado una cantidad indiscriminada de noticias, bombardeo de información, saturación en redes sociales, comentarios a favor o en contra de la causa palestina, entre otros; y por supuesto no podía faltar la posición del Presidente a través de la red X, anteriormente twitter.
Pero antes de dar nuestra opinión sobre Petro en este aspecto, esta guerra nos ha dejado algo muy claro. Las potencias del mundo aún hoy acomodan al sur global para vivir bajo un régimen colonial en donde las vidas “blancas” valen más que otras. Todo el tratamiento que ha tenido esta guerra es atroz. Las cadenas de oraciones, apoyos por parte de Estados Unidos, Alemania, Inglaterra, Italia, entre otras potencias a Israel (todos bajo esa deuda histórica que tienen hacia el pueblo judío a causa del Holocausto), les impide ver como el mismo Estado en nombre de Dios está cometiendo un genocidio, y lo peor, que está siendo televisado, como un espectáculo.
Las potencias donan dinero a Israel, dotándolos de armamentos, dándoles palmaditas en la espalda para que continúen perpetuando su causa bíblica. Causa que ha dejado más de 10000 personas palestinas asesinadas a manos de las bombas que indiscriminadamente Israel ha lanzado sobre casas, hospitales, refugios, todo bajo la excusa de “acabar con Hamás”. No, eso no es querer acabar con Hamás, eso es querer acabar con una población que han venido asediando desde hace años. Es querer acabar con una población árabe que sufre de racismo a nivel mundial, es querer acabar con niños, mujeres, personas ancianas, vidas inocentes y civiles que no tienen porque ver sus vidas volar en pedazos en nombre de causas religiosas e intereses bélicos.
Admiramos y celebramos que el Presidente se haya mostrado firme ante la interrupción de relaciones con Israel. Encontramos absurda la proclamación de los grandes medios de comunicación frente a que, esa interrupción de relaciones internacionales, traería al país una crisis en términos de “seguridad nacional”. No, la seguridad nacional de Colombia NO se ve afectada por romper estos lazos. Dejar un claro mensaje a favor de la libertad del pueblo Palestino y aclamar estar en contra del genocidio perpetuado por el Estado de Israel es algo que desde la perspectiva de un medio pacifista, dotamos de mucho valor.
Pero sí estamos en contra de una cosa. Y es que este tipo de discusiones no pueden hacerse a través de X. Las redes sociales si bien son un espacio de opinión, deben manejarse con más cautela cuando se trata de un mandatario que tiene encima a todas las maquinarias políticas tradicionales que buscan papayasos día tras día para venderle al pueblo colombiano una imagen amañada sobre el accionar presidencial. No se debería gobernar por X, y no se debieron hacer comparaciones a través de este medio del Holocausto con esta guerra (que aunque para nosotros los mortales tenga algo de sentido) para un mandatario es pie para ser catalogado de guerrillero y antisemita. Y sí, también reconocemos que al Presidente le hace falta reconocer como un acto terrorista lo que Hamás hizo en Israel a principios del mes pasado.
____________________________________________________________
En este contexto, vale la pena recordar las palabras de Jaime Garzón, quien sostenía que “la labor del servidor público es servir al público”. Si bien el control político y presupuestal es crucial, los jóvenes también deben asumir su rol en la construcción del país. La política no debe ser un territorio desconocido ni exclusivamente partidista, sino un espacio de diálogo constructivo. Es crucial evitar caer en debates polarizados y contribuir a un diálogo enriquecedor. Nuestras acciones sí generan impacto y nuestras elecciones afectan a otros. Si nos preocupan los soldados y la seguridad, es esencial replantear la lógica de la guerra y proveer oportunidades educativas y mejores perspectivas a la juventud. Un país que progresa en su conjunto asegura un futuro próspero.
En síntesis, el proyecto de país que representa la fuerza motriz de la vida encarna un cambio modesto pero esencial. La evaluación del gobierno de Petro exige un enfoque equilibrado y realista, que considere los avances y los desafíos en la misma medida. La participación ciudadana y el debate informado (sin tanta cizaña) son los cimientos para la construcción continua de una nación justa y próspera. En medio de la diversidad de opiniones y críticas, aún entre niebla se vislumbra un sendero hacia un futuro más brillante para Colombia.
Confianza en el Futuro:
Desde Pacifista, se mantiene la confianza en el futuro planteado por el actual gobierno. A pesar de los obstáculos y errores, existe la fiel certeza de que un buen camino es el de la Paz Total, la Reforma Agraria y la Educación al acceso de todos. Se apuesta por la transformación del país que actualmente encarna la Potencia Mundial de la Vida. Y a pesar que el balance del primer año sea complejo y matizado, existe una apertura democrática que hace rato necesitábamos como país.
Si vamos a discutir errores, debemos recordar que todos los gobiernos los han tenido, que las transformaciones no se darán en cuatro años por el mandatario de turno, sino que en nuestra capacidad colectiva de promover esos cambios, se construye el día a día. Hace un año llegó una alternativa a la inercia a la cual estábamos acostumbrados, esa que proponía soluciones fáciles que reciclaban la violencia, hoy reconocemos los avances y los errores, y reconociendo y nutriendo eso logramos un país más Pacifista.
