Manuel Rodriguez, primer ministro del Medio Ambiente en la historia de Colombia, habla acerca de los impactos ambientales y políticos del derrame en Santander.
En los últimos 24 días el pozo Lizama 158, operado por Ecopetrol, ha dejado escapar más de 24.000 barriles de crudo en las aguas de la quebrada La Lindosa y del rio Sogamoso en Santander. Mientras la empresa –que sabía de los problemas en el pozo desde 2016– adelanta esfuerzos por controlar el derrame, ¡Pacifista! le preguntó a Manuel Rodríguez Becerra, profesor de la universidad de Los Andes y primer ministro del Medio Ambiente en la historia de Colombia, acerca de los impactos ambientales y políticos de este derrame.
Pacifista!: ¿Existen precedentes de derrames de estas proporciones en Colombia?
Manuel Rodríguez: Aún tenemos que esperar para conocer la verdadera magnitud del derrame en Santander. Aún no es claro porque no se ha detenido el flujo y porque ha hecho falta transparencia por parte de Ecopetrol y el Gobierno. Podría ser el peor accidente en la historia de Ecopetrol, pero tenemos que esperar a que se detenga para saber.
Recuerdo que hace unos años se rompió un oleoducto y hubo un derrame muy grave, no recuerdo exactamente en donde en este momento. Pero ese no es el único precedente, además están todos los que ha provocado la guerrilla. En el oleoducto Caño Limón-Coveñas se han derramado más de 2 millones y medio de barriles en distintos atentados.
Aún si este llegara a ser el derrame más grande en un solo incidente en la historia de Ecopetrol, la empresa tiene otros pasivos ambientales aún más graves.
¿Cómo cuáles?
La muerte de las ciénagas. A lo largo de los años Ecopetrol ha utilizado las ciénagas del país como depósito para aguas contaminadas por la actividad petrolera. Esto sucedió mucho en los setenta, cuando no existía reglamentación ambiental, pero también ha sucedido después. Ecopetrol ha restaurado algunos de estos daños, otros no. Por eso creo que Ecopetrol es la empresa con más pasivos ambientales en la historia de Colombia, lo que pasa es que algunos de esos daños fueron graduales, es decir sus efectos se vieron a la vuelta de unos años, mientras que en un caso puntual como este la condena pública es mayor.
¿Es normal que pasen varias semanas entre el momento en que comienza un derrame y la reacción de la empresa petrolera?
Tengo la impresión de que Ecopetrol no identificó correctamente la gravedad del derrame. Este tipo de accidente ocurre incluso manteniendo muy buenas practicas de gestión ambiental, pero lo que llama la atención es que hubo una advertencia de la Contraloría, que encontró falencias en el manejo del cierre del pozo. Colombia necesita saber cuáles fueron las respuestas de Ecopetrol y del Ministerio de Ambiente ante estas advertencias.
¿A qué clase de daño ambiental nos estamos enfrentando en este caso?
Eso depende de muchas cosas, de las características del ecosistema dónde ocurra, de la fauna que se encontrara en la región, de la altura de la zona, etcétera. Tenemos que esperar a que se detenga el derrame para evaluarlo porque responder eso a mano alzada es imposible.
Teniendo en cuenta que el ‘fracking’ va ser uno de los temas claves en la campaña presidencial ¿cree que este incidente vaya a tener repercusiones políticas?
Hay sectores que están tratando de aprovechar políticamente este accidente y, bueno, no es extraño en medio de una campaña política. Pero los derrames de petróleo y el fracking son temas completamente distintos. Es probable que Colombia siga adelante con el tema del fracking a pesar de las críticas, pero creo que al menos este incidente va a obligar a Ecopetrol a ser muy cauteloso a la hora de hacerlo.
¿Cómo se limpia una mancha de petróleo en un río?
En esto hay que decir lo bueno lo malo y lo feo: lo bueno es que Ecopetrol tiene una gran capacidad para mitigar derrames de crudo, tienen sistemas para recoger las manchas, tienen sistemas para sacarla del fondo de una laguna, tienen incluso bacterias que han desarrollado en el centro de investigación que se comen el petróleo. Todo esto porque Colombia es un país en el que se derrama más petróleo que en cualquier otro país del mundo, por culpa de los atentados del ELN y antes de las Farc.
Los acuerdos de paz con las Farc tienen un componente ambiental, ¿cree que este derrame ponga en tela de juicio el cumplimiento de esa parte de los acuerdos?
No, para nada. Los que se preocupan por el petróleo no son las Farc, sino el ELN. Los que van a tratar de negociar cosas que tienen que ver con el petróleo son los del ELN porque históricamente esa ha sido una de sus banderas políticas. Ellos siempre han tenido una posición fuerte de nacionalizar la industria petrolera y explotar bien el petróleo. Las Farc nunca se metieron con eso.