En estos contenedores quedaron consignadas las armas de las Farc en La Elvira, Cauca. Foto: Farc El departamento del Cauca volvió a ser testigo de cómo una guerrilla deja las armas. A finales de los ochenta, Caloto y Caldono presenciaron el acto simbólico en el que el M-19 y el
El departamento del Cauca volvió a ser testigo de cómo una guerrilla deja las armas. A finales de los ochenta, Caloto y Caldono presenciaron el acto simbólico en el que el M-19 y el Quintín Lame se deshicieron de sus fierros y ahora, casi 30 años después, en la zona veredal de La Elvira, en el municipio de Buenos Aires, fueron las Farc las que dieron otro paso hacia la paz.
Lejos del protocolo, pues ni el presidente Santos ni los invitados internacionales alcanzaron a llegar al campamento guerrillero, los combatientes le entregaron 2300 armas a la ONU, y los observadores internacionales las registraron, marcaron y acomodaron en los contenedores que desde hace meses reposaban en la Zona Veredal.
Aunque no vamos a ver la imagen de un guerrillero entregando su arma, el hecho de que los fusiles ya no estén en su poder fue entendido por los protagonistas como un gesto irrefutable hacia la paz. Las imágenes a continuación entrarán en la historia de nuestro país.