¡Pacifista! acaba de lanzar su más reciente documental. El conversatorio que siguió a su premier dejó varias reflexiones importantes.
Este miércoles, en la Casa del Teatro Nacional, ¡Pacifista! lanzó su más reciente documental ‘El Naya: la ruta oculta de la cocaína’, que fue el resultado de una inmersión en el Pacífico colombiano, para conocer de cerca la otra cara del negocio del narcotráfico, la de los campesinos que solo buscan una forma de sobrevivir.
Nuestros lectores, amigos de la casa, medios de comunicación y expertos en drogas y sustitución, asistieron a la premiere que estuvo antecedida por la venta de Café Wuasikamas, un café cultivado por la comunidad indígena inga que, en un esfuerzo colectivo, decidió erradicar la amapola de su territorio.
Vea aquí el documental completo:
En el marco de este evento quisimos ver cómo han avanzado, luego de un año de implementación del acuerdo de paz, los temas en materia de sustitución de cultivos ilícitos. Tres voces diferentes nos dieron su opinión: Rafael Pardo, de la Alta Consejería para el Posconflicto; Pedro Arenas, exalcalde de San José del Guaviare y uno de los hombres que más sabe de coca en Colombia: y Hernando Chindoy, un ejemplo de que la sustitución voluntaria sí es posible, incluso sin ayuda del Gobierno.
Estas fueron algunas de las frases que nos dejó el conversatorio:
Rafael Pardo
La esencia del acuerdo busca la sustitución voluntaria y concertada a nivel territorial.
Según el alto consejero para el posconflicto, el capítulo sobre drogas de uso ilícito estipulado en el acuerdo con las Farc no tenía unos parámetros definidos de cómo actuar, lo que los llevó a reformular el desarrollo del plan.
En el Naya se han tenido tres reuniones con la región y nunca se ha concretado un paso hacia la sustitución.
Pardo expuso que una de sus principales preocupaciones de cara a los planes de sustitución de cultivos es el cambio de Gobierno que se avecina en el país y la posibilidad de no darles continuidad. Sin embargo, aseguró que él y su equipo seguirán trabajando “hasta el último día”.
Pedro Arenas
Arenas recalcó los avances que se han hecho con las familias que se comprometieron con el plan de sustitución, pero dejó en evidencia dos problemas que aún están por resolver:
El mercado de cocaína a nivel global sigue intacto.
A veces pareciera que el programa de sustitución va con toda hacia las regiones, pero llega sin institucionalidad. Todos quieren que no haya coca, pero no dan muchas alternativas”.
Hernando Chindoy
Más que confiar en el Estado o en el Gobierno, sabíamos que la sustitución dependía de confiar en nosotros mismos.
La tierra para nosotros es como nuestra mamá, pero no la estábamos tratando como tal. Éramos cómplices de toda la violencia.
Para uno de los creadores de Café Wuasikamas, trabajar colectivamente es un paso importante para avanzar en la sustitución, sin embargo, recalcó que los acuerdos a los que llegan las comunidades con el Gobierno se fraccionan en la práctica, lo que impide un resultado más significativo.
Acá puede ver nuestro conversatorio completo: