Según Diego Cancino, el miedo de la guerra debe desaparecer. Por eso convoca hoy a una gran fiesta en la T.
Diego Cancino es docente, y exasesor de la congresista Ángela Robledo. Ha estado relacionado con el Partido Verde, hasta quiso ser representante a la cámara. Ha trabajado con la ONG Corpovisionarios en temas de cultura ciudadana, pero esta vez no quiere hablar de política ni de investigación porque hoy estará de fiesta. Cancino es el organizador del ‘parrandón’ por el desarme, un evento que se tomará la Zona ‘T’ de Bogotá y contará con la presencia de gaiteros y dj’s con el fin de celebrar la desaparición de los fusiles de las Farc. Lo acompañan en esta iniciativa Juan Carlos Losada, líder de Banderas Blancas; la gestora cultural Ruth Jaramillo; Juana Afanador, investigadora y activista por la paz; Juliana Hernández, activista de Ojo a la Paz; Manuel Echavarria, fundador del Campamento por la Paz y Mario Alvarado de El Avispero Mov.
“¡Pal carajo el miedo ya!” es el mensaje con el que la organización le dice a Colombia que la paz está cerca y que, así como cuando gana la selección nacional de fútbol, la gente debe salir a las calles a celebrar. ¡Pacifista! habló con Cancino sobre la fiesta que se arrancará a las cuatro de la tarde.
¿Por qué hablar de fiesta hoy en vez de política?
En esta ocasión creo que el país debe empezar a girar en la órbita de la dejación de armas, venga uno de donde venga y sea donde sea porque este es uno de los momentos más importantes para el país y eso hay que celebrarlo. Yo he ejercido como investigador en temas de cultura ciudadana, he sido docente y he estado involucrado en la política, pero la idea es que el desarme se convierta en una fiesta de todos, sin importar la profesión.
Colombia es un país fiestero, pero en esta ocasión esa celebración no se vio en las calles. ¿Cómo incentivar esa emoción por un suceso tan importante como la dejación de armas?
Ojalá esta dejación de armas nos inspirara lo mismo que nos genera el fútbol, es decir, tampoco es una cosa de salir a embrutecerse y hacer desmanes, no se trata de incitar a eso, pero yo creo que este tipo de celebraciones nos pueden poner en la misma órbita de emociones, en la alegría y el amor conjunto.
¿Por qué decir “Al carajo el miedo”?
Porque el miedo se tiene que ir pa’ la mierda. Claro, el miedo es una emoción legítima, es algo que nos incrustaron durante años y ha desplazado a millones de víctimas en el país. Esa es la razón por la que estamos despidiendo el miedo. En este país hace algunos años no se podía ni siquiera salir a la calle. De hecho, hace poco estuve en el Putumayo tomándome una cerveza hasta la una de la mañana y una mujer de ahí me decía: “Usted hace cinco años no hubiera podido hacer eso”. También hay que dejar el miedo atrás porque las cifras hablan por sí solas: durante este año, la taza de homicidios ha llegado a sus niveles más bajos desde 1972, eso hay que celebrarlo. Por otro lado, recordemos que hace dos semanas, en ese mismo lugar donde estaremos hoy se instaló un artefacto explosivo, por eso tenemos que manifestarnos con solidaridad, con una voz unánime para mandar ese miedo al carajo.
¿Qué le dirías a esas personas que temen la celebración del desarme por motivos netamente políticos?
Lo primero que yo les diría sería: “Podemos tener diferencias pero ¿Por qué no se montan en esta vuelta? ¿Cuál es la razón y cuál es el temor?” Si su respuesta es genuina, les pediría que discutiéramos, pero si está llena de intereses ocultos ahí si no vale la pena. Culminaría quizás con una petición de juego limpio: “No diga mentiras”, porque de nuevo las cifras hablan por sí solas. Aquí se entregaron más de 7.000 armas por 7.000 excombatientes, eso no había pasado en ningún lugar del mundo, entonces hay que partir de ahí. Que no nos vayan a fregar la construcción de ese país que queremos tener.
Bueno ¿Y qué sucederá mañana en el parrandón?
La idea es que mañana vamos a hacer una gran rumba con varios djs. Va a estar el ‘Flaco’ Solórzano poniendo música, varias figuras de la radio pública, es posible que se pase Diana Ángel y muchísimas figuras públicas que también van a celebrar. Hasta tendremos un ‘abrazatón’ por la esperanza. Vamos a poner música y a abrirle un espacio a la gente para que se exprese. Ojalá eventualmente este parrandón se haga más grande, inclusive tenemos la idea de hacer un gran concierto con bandas como Bomba Estéreo, Chocquib Town, entre otros.