Los congresistas del uribismo discuten si se la jugarán por el No o por la abstención en la campaña por la refrendación.
- El expresidente y senador Álvaro Uribe recoge firmas contra los acuerdos de paz alcanzados entre el Gobierno y las Farc. Foto: Centro Democrático
Aunque la coalición de Gobierno y los distintos movimientos de izquierda ya arrancaron la campaña por el “sí”, el uribismo aún no decide cómo enfrentará el plebiscito con el que se refrendarán (o no) los acuerdos de La Habana. Los congresistas del Centro Democrático (CD) se encuentran en consultas desde este miércoles, cuando se instaló la nueva legislatura del Congreso, para decidir si harán campaña por el “no” o promoverán la abstención.
El debate se da en medio de la apertura al diálogo condicionado que anunció el expresidente y senador Álvaro Uribe, quien le dijo a Santos y a la guerrilla que el CD se vincularía al proceso de paz si ellos aceptaban revisar los puntos álgidos de la negociación: la participación política de los guerrilleros y el nuevo modelo de justicia transicional.
Como es poco probable que la mesa de conversaciones acepte esa solicitud a estas alturas del proceso, cuando sólo falta por definir uno de los seis puntos de la agenda, el partido de Uribe deberá definir rápidamente su estrategia para encarar el plebiscito. El expresidente ya les pidió a los congresistas que empezaran las consultas con afiliados, ediles, concejales, diputados, alcaldes y gobernadores para saber si se inclinan por el “no” o por la abstención.
Los partidarios de una y otra opción parten de cálculos distintos. Del lado del “no”, que impulsan senadores como José Obdulio Gaviria, Iván Duque y Paola Holguín, hay convicción de que la oposición le puede ganar al “sí” gracias a los más de siete millones de votos que arrastra la figura de Uribe y al “descontento de la ciudadanía” con la gestión de Santos, pese a que el plebiscito sólo se convocará para aprobar o no el acuerdo con las Farc. En la última encuesta Gallup, el 64% de las personas consultadas desaprobó el desempeño del mandatario, mientras el 50% aprobó el rumbo del proceso de paz.
En diálogo con ¡Pacifista!, el senador Duque aseguró que su postura de hacer campaña por el “no” se basa en que “el Gobierno puso las cosas en todo o nada” al reducir la refrendación de los acuerdos a una sola pregunta. Sus argumentos para promover el voto negativo, en caso de que esa fuera la opción del CD, serían básicamente tres: “que los máximos responsables de crímenes de lesa humanidad no pagarán cárcel; que el acuerdo permite la participación en política de los miembros del secretariado de las Farc, pese a que la Constitución lo prohíbe, y que no hay ningún mecanismo efectivo para buscar y extinguir el dominio de la fortuna ilegal de las Farc para que sea destinada a la reparación de las víctimas”.
- Bancada uribista en el Congreso. Foto: Twitter-@charoguerra
Quienes le apuestan al “no” también ven el plebiscito como una oportunidad para medir la capacidad electoral del Centro Democrático de cara a las elecciones presidenciales de 2018, para las que se perfilan Duque, el excandidato a la vicepresidencia Carlos Holmes y Óscar Iván Zuluaga, que acaba de renunciar a la dirección del partido para impulsar esa aspiración por segunda vez consecutiva.
Del lado de la abstención, sus promotores opinan que el plebiscito no es el mecanismo adecuado para refrendar los acuerdos, que reducir la consulta a una sola pregunta es “simplista”, que el umbral del 13% aprobado por la Corte Constitucional no es representativo y que el Gobierno tiene todo el músculo financiero y burocrático para hacer campaña. Dicen, además, que votar por el “no” implica legitimar el plebiscito y aceptar su resultado, que según ellos será favorable a la mesa de conversaciones porque la oposición está en “desventaja”. En esta línea se encuentran Carlos Holmes, senadores como Alfredo Ramos Maya, Susana Correa y Paloma Valencia, y representantes a la Cámara como Federico Hoyos.
Hoyos opina que “con ese umbral tan irrisorio no hay manera de competir, porque los poco más de 4 millones de votos que necesita el ‘sí’ los tienen La U, Cambio Radical, liberales y partidos de izquierda juntos, con voto de maquinaria”. Agrega que “el otro escenario es que el ‘no’ fuera mayoritario, pero creo que eso ya está muy arreglado, muy ganado, y nosotros al comparecer a ese proceso estaríamos aceptando las reglas que nos pusieron”. Para Hoyos la abstención es un asunto de coherencia política, teniendo en cuenta que el CD siempre cuestionó el plebiscito como mecanismo de refrendación.
Aun así, si el uribismo se decide por la abstención estaría renunciando a la posibilidad de medirle el aceite a su proyecto político, más, en tiempos en los que ya se ve en el horizonte la próxima contienda presidencial. En últimas, será el próximo Gobierno el que deberá continuar la implementación de lo pactado con las Farc, si es que el “sí” gana el plebiscito.
Según declaró Uribe este jueves, “en el curso de los próximos días” se conocerá la postura definitiva del CD, que por ahora es el único partido que no le apostará al “sí”. De momento se desconoce la posición del Partido Conservador, que está divido frente al proceso de paz y que no tomará una decisión –oficial– hasta conocer el acuerdo final entre el Gobierno y las Farc.