Hablamos con Víctor De Currea-Lugo, uno de los académicos colombianos que mejor conoce la forma de operar de EI.
En mayo pasado varios medios nacionales reportaron que el Batallón Colombia estaba siendo atacado por el Estado Islámico en el Sinaí, al norte de Egipto. No hubo graves consecuencias para ninguno de los soldados del país. Pero, ¿es cierto que los soldados colombianos están en la mira del Estado Islámico (EI)?
El Batallón Colombia, compuesto por varias centenas de soldados nacionales, hace parte de la Fuerza Multinacional de Observadores desde principios de los años 80. Su misión, junto a fuerzas de otros países como Australia, Estados Unidos, Noruega, Francia, Inglaterra, Holanda, Uruguay, entre otros, es garantizar la paz y la tranquilidad en el Medio Oriente. Y se limitan, oficialmente, a observar y reportar las violaciones al tratado de paz entre Egipto e Israel, y proteger las instalaciones del cuartel general de la Fuerza Multinacional.
Su labor no es de choque, es de paz. Aún así, la semana pasada el tema volvió a aparecer en los medios, pues otro contingente del Batallón Colombia fue enviado al Sinaí. Noticias UNO advirtió que cada vez son más la posibilidades de que ese batallón se enfrente al Estado Islámico.
En medio del pánico que ese grupo radical ha creado alrededor del mundo a punta de brutales atentados, hablamos con Victor de Correa Lugo, una de las personas que más sabe del tema en el país, para que nos contara si existe la probabilidad de que el Estado Islámico realice acciones en contra de Colombia o sus Fuerzas Militares y qué papel juega nuestro país en el ajedrez mundial desde la perspectiva de este grupo armado. Esto nos dijo:
¿Qué es el Estado Islámico? ¿Cómo lo definiría?
El Estado Islámico, también conocido como Daesh, por acrónimo en árabe, es sobre todo un proyecto político militar que tiene unas pretensiones de Estado, de Califato, y que está controlando una zona equivalente a 135 mil km2. Controla un terreno tan grande como Gran Bretaña, con una población de aproximadamente 10 millones de habitantes y que se encuentra, fundamentalmente, entre Irak y Siria.
Si bien no tiene pleno control territorial, sí tiene tiene expresiones militares y una importante y creciente influencia en zonas como Líbano y Libia. Se ha convertido en un ejemplo de yihadismo para otras expresiones de otras partes del mundo.
¿Qué tanto respaldo y legitimidad tienen?
Ellos funcionan como un Estado y, en un Estado, hay gente que está a favor y gente que está en contra. Pero no es un problema solo de legitimidad sino real, de control territorial. Ahora, la legitimidad es dada principalmente por un sector de la sociedad Suní –no toda, ni más faltaba–. Hay un reducto de suníes que están de acuerdo con el Estado Islámico, por los errores del gobierno chiíta de Irak, los del gobierno Alawi de Siria, y sobre todo, por los errores y crímenes que derivan de la presencia de Estados Unidos en Irak desde el 2003.
¿Qué quieren?
Lo tienen claro, quieren crear un Estado.
En ese propósito, ¿qué papel juega la violencia y los ataques indiscriminados?
Ellos dividen el mundo entre fieles e infieles. Fieles son los ‘verdaderos’ musulmanes, y el resto son infieles. Ahí caben los ateos, los cristianos, los chiies, y los sunies que no les hacen caso. Pero ellos se reservan el derecho de atacar a aquellos países que los atacan. Sin justificar de ninguna manera los ataques, hay que explicar que la andanada contra Francia tiene que ver con los ataques sistemáticos y la afectación a los civiles que hace el ejército francés bombardeando Siria e Irak –Siria principalmente–. Lo mismo se puede decir de la participación de Estados Unidos en la región.
¿Cómo ve el E.I a Colombia?
No nos ve, Colombia es absolutamente marginal. Primero, porque geográficamente queda muy lejos; segundo, porque a nivel internacional, políticamente, Colombia no es importante. No es un país relevante, no hace parte de las estrategias ni de las prioridades del E.I. Aquí no hay una población importante musulmana y la poca población musulmana que hay no está radicalizada. Por tanto, no hay de dónde agarrarse para creer que al E.I. le preocuparía o le interesaría algún tipo de acción militar en Colombia.
Pero para ellos alguien que los ataque puede convertirse en un potencial enemigo… ¿podría darse pensando en las noticias que han surgido del Batallón Colombia?
Claro, pero usted misma lo dice, atacan a alguien que los ataque. En la práctica, Colombia no está participando en ninguna coalición, ni tirando bombas en Siria o en Irak. Las fuerzas multinacionales de Colombia que hacen parte de la misión de paz de Naciones Unidas en el Sinaí, fruto de la guerra del 63, primero, son fuerzas de paz y, segundo, el E.I no tiene un control territorial en Egipto.
Ahí, en Egipto, están funcionando una serie de grupos radicales que, digamos, serían pro Daesh, como había unos pro Al Qaeda. Pero a mí me cuesta trabajo decir que ahí está el Estado Islámico.
Decir que porque ahí hay una misión de paz, donde hay unos soldados colombianos, me parece lo que los psiquiatras llamarían una asociación laxa. No hay de dónde.
En algún momento se habló de una amenaza de ataque a Brasil. ¿El caso es diferente?
El caso es diferente porque en Brasil sí hay varios millones de personas descendientes de árabes. Además, teniendo en cuenta que en este momento están en las Olimpiadas, podrían hacer alguna cosa. No hay que perder de vista que uno de los elementos esenciales del terrorismo es que sus acciones se sepan. En otras palabras: lo importante de una bomba no es que explote sino que salga en los medios de comunicación. En esta coyuntura podría darse algún tipo de acción. Ojalá no se dé.
Aún así, yo veo muy lejano que el EI vaya más allá de sus geografía “naturales”, que ha ido creando en Oriente Medio, y de los países que atacan sus territorios en Siria o Irak.
Entonces, para tumbar mitos que han creado los medios… No hay relación entre el Batallón Colombia y el Estado Islámico.
No. Además, lo que hace el Batallón Colombia lo hace bajo la bandera de Naciones Unidas, no bajo la bandera colombiana. Es decir, una acción militar que hagan los cascos azules en el Sinaí no es responsabilidad de Colombia. Por lo tanto, puedo decir que esa teoría sólo corresponde a nuestras ganas y afán de protagonismo.
El E.I ha creado pánico en todo el mundo, ahora cualquier cosa que pasa se les atribuye…
Claro, ahora falta que digan que a Gaitán lo mató el Estado Islámico.