Mientras se desplazaban en una camioneta por la vía que conduce de Pasto a Tumaco, tres agentes del CTI fueron interceptados y asesinados.
En las últimas horas, el miedo volvió a ser noticia en Nariño. En la tarde de este miércoles, la Fiscalía General reportó el asesinato de tres miembros del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) da en la zona de La Guayacana mientras se desplazaban en una camioneta por la vía que conduce de Pasto al municipio portuario de Tumaco. Según las investigaciones preliminares, el atentado lo realizaron integrantes del Frente Óliver Sinisterra (FOS), disidencia de las Farc comandada por Walter Patricio Arizala, alias ‘Guacho’.
Las tres víctimas del ataque fueron Yair Montenegro, técnico en explosivos de 29 años que llevaba nueve años trabajando en la Fiscalía; el administrador financiero Douglas Guerrero, de 38 años y 14 de servicio y Willington Montenegro, también técnico en explosivos, de 43 años y con una experiencia de 24 en la Fiscalía. Los tres se encontraban en una misión de investigación contra estructuras de narcotraficantes en la zona cuando fueron interceptados por cinco delincuentes que dispararon al vehículo y luego lo incineraron.
El fiscal general, Néstor Humberto Martínez, dijo lo siguiente en una rueda de prensa posterior al atentado:”A sus familias toda nuestra solidaridad, comparto con ellas el profundo dolor que embarga a los colaboradores de la Fiscalía y estamos de luto (…) Toda la capacidad operativa e investigativa de Fiscalía ha sido dispeusta en el terreno para asegurar que los responsables de estos asesinatos comparezcan inmediantamente ante la justicia y sean objeto de condenas ejemplarizantes. Seguiremos luchando con determinación contra las organizaciones criminales que allí operan (…) redoblaremos las acciones para desmantelar y neutralizar judicialmente que operan en La Guayacana”.
Esta mañana, según información del Ministerio de Defensa, fueron capturadas en esta zona ocho personas que harían parte del Frente Óliver Sinisterra y que habrían participado en el atentado contra los miembros del CTI. Se incautaron, además, armas de esta organización y equipos de comunicación, con lo que sería el segundo “golpe” por parte de la Fuerza Pública a la estructura criminal de alias ‘Guacho’ en las últimas semanas.
Según el gobernador encargado de Nariño, Édgar Insadará, “Cada vez que este criminal se siente acorralado genera un golpe terrorista contra la comunidad, en este caso a miembros del CTI”. Dijo, además, que esta situación obedece a las estructuras de narcotráfico que operan en la zona y a la desatención del Estado. También, en otra entrevista, aseguró que la violencia en este departamento se debe a la intervención tardía y a incumplimientos del Gobierno en planes específicos, como la sustitución de cultivos.
Asesinó a cinco civiles, y ahora esto…
Han pasado cuatro meses desde que la disidencia de alias ‘Guacho’ asesinó tres periodistas ecuatorianos del diario El Comercio: a Javier Ortega, Paúl Rivas y Efraín Segarra los mataron a tiros después de permanecer 19 días secuestrados en la espesa selva de la frontera entre Colombia y Ecuador, zona estratégica para los narcotraficantes. Estos asesinatos le dieron la vuelta al mundo. El Papa Francisco manifestó su rechazo, los medios del mundo hablaron del caso, pidiendo garantías para libertad de prensa. Los presidentes de Colombia y Ecuador, Juan Manuel Santos y Lenin Moreno, prometieron capturar a ‘Guacho’ en el menor tiempo posible. Promesa, por ahora, incumplida.
Al parecer, ‘Guacho’ le está ganando la batalla al Estado. Informes de la Fundación Paz y Reconciliación revelaron la estrecha relación entre la disidencia de las Farc en Tumaco con el Cartel de Sinaloa. Son por lo menos 200 hombres los que están bajo el mando de ‘Guacho’ en la zona rural de Tumaco. Pese a que el gobierno militarizó esta región desde noviembre de 2017, lo cierto es que los resultados en materia de seguridad son pocos. El Ministerio de Defensa anunció la captura del hermano de ‘Guacho’, Juan Gabriel Arizala, hace un mes exactamente. Como resultados también presentaron la captura de alias ‘Weiner’, presunto coordinador de las finanzas de la disidencia.
El asesinato de los tres agentes del CTI demostró algo muy grave: la disidencia no tendrá reparos en seguir asesinando para presionar un retiro paulatino de las Fuerzas Militares en Tumaco. Y es que no solo se ha tratado de los periodistas y los agentes. Aunque tuvo poco eco mediático, la disidencia de ‘Guacho’ secuestró y asesinó a sangre fría a una pareja de ecuatorianos hace algunas semanas. El pasado 4 de julio el Instituto de Medicina Legal confirmó que dos cuerpos encontrados en Tumaco correspondían a Óscar Villacís y Katty Velasco, secuestrados desde el pasado 11 de abril por la disidencia.
El resultado del dictamen de Medicina Legal: dos homicidios. “La muerte ocurrió como consecuencia de múltiples heridas producidas por arma cortante y cortopunzante en ambos cuerpos a nivel de cuello y tórax”, dijo el director de Medicina Legal, Carlos Valdés. Los familiares de la pareja ecuatoriana están indignados, no solo por la poca trascendencia que este caso tuvo para los medios, sino por el silencio de ambos países al respecto. Por el momento, los gobiernos sostienen un plan militar que no ha dado resultados y, como medida de presión, han aumentado progresivamente el valor de la recompensa por la cabeza de ‘Guacho’: ahora ofrecen 1.000 millones de pesos. El fiscal general, Néstor Humberto Martínez, también confirmó lo que en su momento dijo la Fundación Paz y Reconciliación: ‘Guacho’ sería el brazo armado del Cartel de Sinaloa en Colombia y está fuera de control.
El uribismo pone sobre la agenda la ‘seguridad democrática’
Mientras la mayoría del sector político colombiano rechazó este atentantado, y el presidente Juan Manuel Santos aseguró que irían “por todos los responsables” y que no habría duda de que “‘Guacho’ y su gente pagarán”, algunos miembros del Centro Democrático fueron más allá y volvieron a cuestionar que tras el Proceso de Paz con las Farc sigan ocurriendo estos hechos.
El senador Álvaro Uribe escribió en su cuenta de Twitter un mensaje en el que reitera la palabra “impunidad” y, de paso, nuevas operaciones militares:
Disidencias Farc hoy en Nariño, el legado de impunidad de Santos. Qué esperará a Colombia cuando se enfrente la expansión narco terrorista por parte del nuevo Gbno! pic.twitter.com/WceJnHGJi8
— Álvaro Uribe Vélez (@AlvaroUribeVel) 12 de julio de 2018
Por su parte, Carlos Felipe Mejía, otro senador del Centro Democrático, dijo que lo que sucedió es la muestra de que los “narcoterroristas” de las Farc están al mando de alias ‘Guacho’. “Nuevamente le decimos a Juan Manuel Santos… ¿qué clase de paz es esa?”, añadió. Alvaro Hernán Prada, representante a la Cámara del Centro Democrático, fue más lejos y aseguró que “ese cuento reforzado que quieren aparentar, de que el bandido ‘Guacho’ heredó todos los cultivos, milicianos y poder del secretariado Farc, no se lo cree nadie. Es subordinado de los que irán al Congreso”.
Si bien es cierto que el partido Farc ha rechazado cualquier relación con ‘Guacho’ e incluso lo han catalogado de disidente y narcotraficante, las acciones del Frente Oliver Sinisterra (FOS) podrían darle legitimidad a la estrategia del presidente electo, Iván Duque, quien promete una ofensiva militar “sin precedentes”.