Más de seis mil guerrilleros recorren 14 departamentos para ingresar a las zonas veredales de transición.
Han pasado 52 años desde que un pequeño grupo de campesinos comunistas de Tolima, Huila, Valle del Cauca y Cauca se alzaron en armas y crearon el Bloque Sur de la Guerrillas, el embrión de las Farc. Más de cinco décadas desde que esa guerrilla campesina comenzó su lucha y se enfrascó con los gobiernos de 12 presidentes en un remolino de capturas, secuestros, tomas de pueblos, bombardeos, combates y campañas de propaganda. Hoy ese ejército, con cerca de 6.300 hombres y mujeres en armas, recorre 36 rutas en 14 departamentos de Colombia para ingresar a las 26 veredas en las que dejará las armas.
De acuerdo con cifras oficiales, el Gobierno ha contratado 450 camionetas, 200 camperos, 120 camiones, 30 volquetas, 100 buses, 60 chivas, 80 lanchas, 35 mulas y 10 tractores para transportar a los guerrilleros, con sus objetos personales y sus armas. Es un trasteo gigantesco, por tierra y agua: el punto de partida para el proceso de tres fases en el que las Farc irán abandonando, poco a poco, hasta el último fusil.
La operación arrancó el pasado sábado y se transmite en tiempo real vía Twitter, en las cuentas de los frentes, los bloques y los comandantes de las Farc, que también han denunciado demoras en la adecuación de las áreas comunes de los campamentos donde vivirán los próximos cuatro meses (si no se corre el cronograma establecido en el Acuerdo) con el acompañamiento del Mecanismo de Monitoreo y Verificación.
En 2012, cuando apenas arrancaba la negociación en Cuba, el Observatorio de Procesos de Desarme, Desmovilización y Reintegración de la Universidad Nacional aseguró en su estudio “Presencia de organizaciones guerrilleras y Bacrim en territorio colombiano” que las Farc estaban en 30 de los 32 departamentos del país, a través de 132 subestructuras. En mayo próximo, esa guerrilla habrá desaparecido y estará a un paso de convertirse en un partido político. Muchos de sus integrantes deberán comparecer ante la justicia transicional y reparar a sus víctimas, y otros serán indultados.
Estas son algunas de las imágenes de lo que las Farc han llamado “la última marcha guerrillera”:
