Campesinos, los ninguneados en las medidas por el coronavirus | ¡PACIFISTA!
Campesinos, los ninguneados en las medidas por el coronavirus Imagen: Sebastián Leal
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Campesinos, los ninguneados en las medidas por el coronavirus

Staff ¡Pacifista! - abril 20, 2020

#Divergentes | Organizaciones campesinas le enviaron una carta al presidente Duque donde le piden que tome medidas específicas para la protección de sus comunidades ante el Covid-19.

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“En medio de la crisis generada por el Covid-19, estamos sufriendo afectaciones en nuestra territorialidad, cultura y economía”. Así comienza la carta que 47 organizaciones campesinas de todo el país le enviaron al presidente Iván Duque este lunes donde le piden medidas de protección específicas para sus comunidades ante el nuevo coronavirus. “La pandemia profundiza la desigualdad que hemos enfrentado históricamente y requerimos esfuerzos concretos por parte del Estado para superar esta situación”.

De acuerdo con la carta, las comunidades campesinas han tomado sus propias prevenciones para cuidarse. Entre esas medidas están el control del ingreso a los territorios, el autoconsumo (comer lo que siembran), cultivar más alimentos, incentivar el intercambio o trueque de productos, promover el distanciamiento en espacios de trabajo y apoyarse en las radios comunitarias o los grupos de WhatsApp para divulgar información sobre la pandemia. Todas son acciones autogestionadas y costeadas con recursos propios.

Sin embargo, esas prevenciones no son suficientes para proteger a los campesinos del Covid-19. María del Socorro Pisso, secretaria general de la Federación Nacional Sindical Unitaria Agropecuaria —Fensuagro—, una de las organizaciones que firman la carta, señala que las medidas que ha sacado el Gobierno Nacional para atender la emergencia sanitaria son amplias o generales y no incluyen al campesino. “Esto pasa porque aún no se reconoce nuestra identidad”, le dijo a Pacifista!

Un ejemplo de lo que menciona Pisso es la educación virtual. Para prevenir contagios masivos, se ordenó el cierre de colegios en todo el país y la virtualización de la enseñanza. Pero no se tuvo en cuenta que muchos de los estudiantes en el campo no tienen buen acceso a internet o un computador en casa. “Ojalá el problema solo fuese tecnológico. La pandemia profundiza el problema mayor: el acceso a educación digna y de calidad en el campo”.

Las organizaciones campesinas que firman la carta identificaron siete grandes problemas que se han profundizado por la crisis del Covid-19 y le hacen propuestas al Gobierno Nacional para que las solucione. Entre los más importantes está la salud: resaltan que las ciudades capitales concentran el mayor número de camas en unidades de cuidados intensivos, mientras que no hay en departamentos como Amazonas, La Guajira, Vaupés y Guaviare.

“Por otra parte, nos preocupa que, como lo ha señalado la Organización Mundial de la Salud, el Covid-19 provoca una mayor mortalidad en mayores de 60 años (…) Los campesinas estamos en la actualidad inmersos en un proceso demográfico de envejecimiento, lo cual nos pone en mayor riesgo ante la pandemia”. Las propuestas en este punto son expedir prontamente el plan de salud rural, instalar puestos médicos en las zonas rurales donde no hayan, brindar pruebas rápidas de diagnóstico y suministrar kits de prevención –tapabocas, gel antibacterial y alcohol-.

Otro problema clave que identificaron las organizaciones es el acceso al agua. Si bien una de las medidas básicas de prevención de contagio es el lavado permanente de manos, el acceso a agua potable en el campo es deficiente. En la carta se propone que el suministro de agua sea permanente y que se doten a las comunidades de elementos para potabilización. También que se fortalezcan los acueductos comunitarios y se reduzcan sus costos de funcionamiento.

La economía campesina también ha resultado afectada por la emergencia sanitaria. El nuevo coronavirus representa más barreras para la comercialización de lo que se siembra y produce en el campo. “Seguimos produciendo, el trabajo del campesino no se detiene. Pero eso el Gobierno Nacional no lo tiene en cuenta. Importan alimentos y garantizan la cantidad. Pero no la calidad ni la sostenibilidad del comercio del que vive el campesino”, comenta la secretaria de Fensuagro.

Recordemos que los ministerios de Hacienda, Agricultura y Comercio firmaron el decreto 523 del 7 de abril de este año, donde “se modifica parcialmente el Arancel de Aduanas en relación con la importación de materias primas como el maíz amarillo duro, el sorgo, la soya y la torta de soya”. Con la norma se pretende apoyar la demanda de estos productos, pero no se tuvo en cuenta la oferta nacional.

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Adicional a esto, los campesinos hoy tienen dificultades en la adquisición de suministros para sembrar (por los altos costos), el acopio de lo que cosechan, el transporte hacia las ciudades y la venta a los consumidores debido al confinamiento obligatorio. Las organizaciones denuncia en la carta que esas situaciones son aprovechadas por los intermediarios para “pagar los productos muy por debajo del precio justo y al mismo tiempo vender a precios exorbitantes”. Para que los campesinos no resulten golpeados por los efectos económicos del Covid-19, se propone medidas como un programa que compre la producción campesina y que reemplace las importaciones, la promoción de mercados campesinos y que la ayuda humanitaria del Estado se abastezca del campo.

El apoyo a las mujeres campesinas —que por la cuarentena tienen más tareas de cuidado en el hogar o pueden resultar víctima de violencia intrafamiliar—, la seguridad de los líderes sociales y el complejo acceso a educación por el cierre de los colegios son otros problemas que las organizaciones detectaron. Pueden leer la carta en este enlace.