"No vemos soluciones reales, notamos que esto va para largo, pero nosotros siempre hemos aguantado”: indígenas del Valle del Cauca
La Minga nacional indígena lleva 16 días en movilización para exigir que el Estado, por medio del actual gobierno, atienda las solicitudes que están pidiendo las comunidades indígenas. A la fecha ya son en promedio 22.000 indígenas en la movilización de diferentes partes del país como, Huila, Valle del Cauca, Risaralda, Quindío, Antioquia, Chocó. Hoy se suman las Autoridades Indígenas de los Pueblos de Putumayo, Pasto y Quillasinga.
Varias son las razones por las que se convocó a esta Gran Minga Nacional. En primer lugar tiene que ver con el incumplimiento de varios acuerdos a los que se habían llegado con pasados gobiernos. Por otro lado, está el hecho de que en el actual Plan Nacional de Desarrollo el capítulo indígena quedó como anexo y no hizo parte del cuerpo del texto. Esto supone que el presupuesto que había quedado concertado con el gobierno Santos de cerca de 10 billones de pesos para los cabildos indígenas, queda en el aire.
Pero además, la Minga no sólo tiene reclamos puntuales (por incumplimiento o por falta de presupuesto). En el fondo hay reclamos mucho más generales o estructurales, si se quiere. La Minga pide, por ejemplo, que se repeten y se implementen los Acuerdos de Paz, que no se objete la JEP, que se dejen de otorgar tìtulos mineros a multinacionales, que no haya fracking y, en general, que haya una política seria de potección del medio ambiente. Demandas en las antípodas de las políticas del actual gobierno.
Desde el 10 de marzo la movilización ha pedido la visita del Presidente Iván Duque al Cauca. Sin embargo, Duque se ha negado a asistir “si persisten los bloqueos y las vías de hecho”. Una decisión que ha traído como consecuencia la continua movilización y el atraso de una negociación.
La Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC) en su más reciente comunicado expresó la falta de voluntad que han visto por parte del gobierno: “les corresponde la asignación de 3 comisiones y una mesa de diálogo para atender los requerimientos de las comunidades, construir la ruta y protocolo para la visita del Presidente, y la activación de una mesa de Garantías y Derechos Humanos, en las que ha quedado en evidencia la falta de voluntad política para afrontar un dialogo sensato y útil por parte del equipo de gobierno asignado”
Por su parte, Nancy Patricia Gutiérrez, Ministra del Interior, en diálogos en Mandivá, Cauca anunciaba: “La Minga pide 49.100 hectáreas de tierra. El gobierno puede comprar 1.500. El Gobierno de Iván Duque es serio y no se compromete en lo que no puede cumplir”
Yesid Baltazar, representante de la Organización Regional Indígena del Valle del Cauca (ORIVAC) considera que ven una imagen “hipócrita” por parte del gobierno. “Cuando están en la mesa dicen una cosa y en los medios dicen otra. Quieren dejar el dialogo solo en una región, pero esto es una movilización nacional, vemos una doble intención en esos comunicados. No vemos soluciones reales. Como va la situación notamos que esto va para largo, pero nosotros siempre hemos aguantado”.
Richard Sierra, representante de la Organización Indígena de Antioquia (OIA), comentaba que esta lucha va más allá de una lucha indígena. “Estamos dando una pelea por toda la población, defendemos el agua que está contaminando la minería. También queremos que se avance en la paz y queremos denunciar la falta de protección que viven nuestros líderes”
Dentro de la movilización, además, se ha conocido la presencia de diferentes personas que han intentado inflitrar la Minga. El pasado 17 de marzo se conoció la presencia de un presunto policía que intentaba pasarse por encima el control de la guardia indígena. Algo que, según representatnes indígenas, se está controlando para evitar futuras infiltraciones de la fuerza pública o de grupos ilegales.
Los gremios económicos del suroccidente del país también han jugado un papel importante. En el encuentro realizado en Popayán este 25 de marzo con el gobierno nacional, los gremios le pedían al presidente que no fuera al Cauca “mientras los indígenas mantengan bloqueada la vía Panamericana” Una decisión que sin duda afecta la continua solicitud de los indígenas, “quieren que nos reunamos en Bogotá para que salgamos en la foto con un refrigerio y para que muestren una supuesta solución con los indígenas. Nosotros no queremos caer en la trampa, queremos que participe la comunidad en su territorio” Yesid Baltazar, representante de ORIVAC.
Esta Minga, a diferencia de las que hubo durante el gobierno Santos en los años 2013, 2016 y 2017, ha sido mucho más dura. Como lo infirmó en pasados días La Silla Vacía, la Minga no acepta ahora dialogar con ministros y viceministros, como hicieron durante el gobierno Santos. Sólo se sentarán a negociar con el presidente Duque.
Se parece cada vez más, en cambio, a la Minga indígena que hubo en 2008, cuando Uribe estaba de presidente. Ese año hubo alrededor de 60.000 indígenas movilizados de distintas etnias, principalamente los Nasa. Ese año, la Minga hizo un recorrido de cerca de 120 kilómetros entre Santander de Quilichao y Cali. Luego se movilizaron hasta Bogotá. Una de las causas que movía la movilización en ese entonces era el desconocimiento del conflicto armado por parte del gobierno Uribe.
Hoy, 11 años después, la Minga indígena coge con cada día que pasa más fuerza. En los próximos días se le sumarán indígenas del Bajo Cacua antioqueño y sindicatos de trabajadores.
Y Duque sigue sin aparecerse.
